Reportan 300 casos sospechosos de malaria y dengue en una semana
Unos 277 casos sospechosos de malaria, de los que nueve fueron confirmados y 37 casos sospechosos de dengue, con sólo dos confirmados, fueron notificados al sistema de vigilancia epidemiológica durante la última semana.
Además, recibió la notificación de 25 casos sospechosos de leptospirosis, sin que ninguno de los casos fuera confirmado mediante prueba de laboratorio, de acuerdo al boletín correspondiente a la semana epidemiológica dos del presente año.
En las dos primeras semanas del año, el sistema registra un acumulado de 443 casos sospechosos y 18 confirmados de malaria, una enfermedad transmitida a las personas por la picadura del mosquito Anopheles, que se cría mayormente en aguas estancadas y pantanosas.
De los reportados en la última semana, el informe destaca que el 44% de los casos sospechosos residen en la provincia Valverde, el 13% en el Santo Domingo y el 10.4% en Azua, mientras el 51.1% de los casos se detectó en pacientes de sexo femenino.
Entre 20 y 29 años
En torno al dengue, enfermedad transmitida por el mosquito Aedes aegyptis que se reproduce en aguas limpias acumuladas dentro o alrededor de los hogares, destaca que de los casos reportados en la semana epidemiológica número dos, el 29.7% provienen de la provincia de Duarte, el 16.2% de Hermanas Mirabal y el 10.8% de Santo Domingo.
Indica que el 56.7% de los afectados son de sexo masculino, y el grupo etario más afectado corresponde al de 20 a 29 años, representando el 27% de los casos. Señala que la incidencia acumulada de casos sospechosos es de 16.21 por cada 100,000 habitantes, lo que muestra una disminución del 95.25% en comparación con el mismo período del año 2024.
Un 23% de aumento
En el caso de la malaria, el Ministerio de Salud Pública destaca que refuerza el compromiso de su reducción a través de estrategias integrales, que incluyen detección temprana, tratamiento oportuno, control del vector y búsqueda activa de casos. Además, se prioriza la educación comunitaria para garantizar una respuesta efectiva y sostenible frente a la enfermedad.
Sobre el dengue, señala que refuerza su compromiso con el control y la prevención, intensificando sus esfuerzos en diversas áreas claves.
Indica que se continúa con una vigilancia epidemiológica rigurosa y se implementan estrategias preventivas como la eliminación de criaderos de mosquitos, la fumigación en zonas de riesgo y el fortalecimiento de la educación comunitaria.
Recuerda que bajo el lema “Limpiar, tapar y eliminar”, se promueve la responsabilidad de la población en la limpieza de sus hogares, el tapado adecuado de recipientes con agua y la eliminación de objetos que acumulen agua, favoreciendo así la reducción de criaderos.
LD