Exigen intensificar la búsqueda de ambientalista chilena Julia Chuñil
Decenas de personas se manifestaron el sábado pasado frente al palacio presidencial de La Moneda para exigir al Gobierno de Chile intensificar la búsqueda de la activista ambientalista mapuche Julia Chuñil, desaparecida en extrañas circunstancias en noviembre pasado en el sur del país.
Con pancartas con frases como «¿Dónde está Julia Chuñil?» o «El Estado debe responder», los manifestantes hicieron una sentada frente a la sede del Gobierno de Chile y reclamaron «más recursos» para la investigación de búsqueda de la ambientalista.
Chuñil, de 72 años, es una destacada dirigente medioambiental de la región de Los Ríos, a 850 kilómetros al sur de Santiago, que se encuentra desaparecida desde el pasado 8 de noviembre, cuando salió de su hogar en compañía de su perro.
La organización Escazú Ahora denuncia que la activista fue víctima desde 2018 de amenazas verbales, intimidaciones físicas e incluso ataques contra su propiedad por parte de empresarios locales que quieren explotar un bosque nativo de 900 hectáreas y comercializar su madera.
Es inaceptable que una defensora de la naturaleza como Julia haya tenido que enfrentar este tipo de hostigamiento, y que hoy no sepamos su paradero. No es un caso aislado. Latinoamérica sigue siendo la región más peligrosa del mundo para defender el medio ambiente, y Chile no es la excepción», dijo a EFE el presidente de la ONG, Sebastián Benfeld.
Estado de las investigaciones
La Fiscalía chilena confirmó a mediados de enero la aplicación de un protocolo de derechos humanos derivado del Acuerdo de Escazú, el gran pacto de Latinoamérica por la naturaleza y el primero en el mundo que incluye la protección de los activistas medioambientales, para intensificar la búsqueda de Chuñil.
«En 2023, registramos más de 30 casos de violencia contra una veintena de defensores ambientales, y en 2024 hemos observado no solo un aumento en estos casos, sino un escalamiento en los niveles de violencia. Exigimos acciones concretas para garantizar la seguridad de quienes, como Julia, luchan por la protección de nuestro patrimonio natural», agregó Benfeld.
Una de las primeras medidas que adoptó el presidente chileno, Gabriel Boric, al llegar al poder en marzo de 2022 fue la adhesión al Acuerdo de Escazú, ratificado unos meses después en el Parlamento.
El tratado se adoptó en Escazú (Costa Rica) en 2018 y entró en vigor en 2021, ratificado hasta por 17 países, entre ellos potencias regionales como Colombia o México.
EFE