El miedo crece en el municipio de Guerra ante la escalada de violencia y robos

La tranquilidad en el municipio de Guerra, provincia Santo Domingo, se ha visto afectada por un incremento en la violencia, que mantiene a sus residentes con constante temor.

En apenas una semana, la comunidad ha sido sacudida por una serie de hechos violentos, entre ellos el asesinato de un hombre conocido como «el Brujo, frente a su vivienda, y la muerte del comercianteMelvin Mosquea Mendoza, abatido durante un presunto asalto en el Colmado Tomás, donde también resultó herida una mujer de 64 años.

A estos sucesos se suman robos, y atracos que, según denuncian los residentes, ocurren con frecuencia y en completa impunidad.

Radamés Martínez Soriano, propietario de un pequeño negocio en la zona, se vio en la necesidad de destinar parte del presupuesto de sus mercancías a la instalación de cámaras de seguridad para proteger su local ante la creciente inseguridad.

«Estamos desprotegidos; esto se ha convertido en una ola de delincuencia», denunció Martínez, quien hizo un llamado a las autoridades para que cumplan con su deber, pues considera que los comerciantes están completamente vulnerables ante la falta de apoyo efectivo en el patrullaje y seguimiento.

«Las patrullas solo pasan cada cuatro horas y no están enfocadas en proteger a la comunidad, sino en sus propios intereses», añadió.

Martínez afirmó que la escasa vigilanciagenera frustración no solo entre los vendedores, sino también entre los vecinos, que se sienten inseguros en sus propios barrios.

Los sectores como El Fao, Mamey y Mojarra son los más afectados por la criminalidad, lugares donde, según los ciudadanos, la Policía rara vez se presenta, dejando a los residentes a merced de los delincuentes.

«Hay muchos robos y atracos, la seguridad está floja, muy floja. La Policía pasa, pero solo a buscar sus chelitos», aseguró Wilson Cruz.

Otro residente, motoconchista, reveló que debe recogerse temprano debido a la inseguridad generalizada.

«A las cuatro o cinco ya estoy en mi casa, porque cuando vives en un barrio donde matan uno hoy, mañana otros, y pasado otro, queda claro que no hay seguridad», expresó el ciudadano que pidió anonimato, alegando que denunciar la situación solo le ha traído consecuencias negativas, debido al escaso respaldo de las autoridades.

Añadió: «Con tantos criminales rondando, los policías son pocos y la vigilancia es insuficiente«.


Irregularidades 

Además de la violencia, los comunitarios denunciaron irregularidades en los operativos migratorios, que aseguran, se han convertido en un negocio corrupto.

«Detienen a las personas, les cobran entre cuatro mil y cinco mil pesos para liberarlos, y al día siguiente vuelven a buscarlos para exigirles más dinero«, denunció Willian José.

Aunque las autoridades aseguran que trabajan en coordinación con el Ministerio Público para esclarecer los hechos y llevar a los responsables ante la justicia, en Guerra los comerciantes bajan sus puertas más temprano y los vecinos viven con el temor constante de la inseguridad.

DL

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.