España rechaza la propuesta de la UE de considerar «verdes» la energía nuclear y el gas natural
SPUTNIK. Madrid se niega a incluir a la nuclear y el gas natural entre las energías respetuosas con el medio ambiente como propone la Comisión Europea. Alemania y Austria tampoco dan luz verde al plan de Bruselas.
España se planta ante la energía nuclear. El Gobierno ha rechazado la propuesta de la Comisión Europea de incluir a esta y a la generación por gas natural en la clasificación de ‘opciones verdes’ en el marco comunitario. Según el borrador del organismo, se plantea considerar como respetuosos con el medio ambiente todos aquellos proyectos que sustituyan al carbón y emitan hasta 270 gramos de CO2 por kW/h.
«Independientemente de que puedan seguir acometiéndose inversiones en una u otra, consideramos que no son energías verdes ni sostenibles», ha destacado la vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, en un comunicado.
La ministra ha recalcado que España «es una firme defensora» de la taxonomía verde como instrumento fundamental para «contar con referencias comunes que puedan ser usadas por inversores para lograr la descarbonización de la economía y alcanzar la neutralidad climática de 2050». No obstante, a su parecer, incluir la nuclear y gas natural entre las energías verdes supondría «un paso atrás».
«No tiene sentido y manda señales erróneas para la transición energética del conjunto de la Unión Europea», ha añadido. Palabras que han suscrito la ministra de Empleo, Yolanda Díaz, y el de Consumo, Alberto Garzón. «Hay un tipo de actitud ante el medio ambiente tanto más peligrosa que el puro negacionismo climático: hablar mucho de transición ecológica y no actuar en absoluto según evidencia científica. Eso mismo le pasa a esta propuesta de la Comisión Europea», ha indicado Garzón a través de su cuenta de Twitter.
Ribera reconoce que nuclear y gas natural tienen un papel en la transición ecológica en los estados miembros, pero «limitado en el tiempo». Motivo por el que deben ser tratadas aparte, no al mismo nivel que energías como la solar o la eólica. «Las emisiones de metano de la generación por gas natural y la cuestión de los residuos de la energía nuclear ponen en cuestión la inclusión de ambas tecnologías dentro de la taxonomía verde de la Unión Europea», han puntualizado desde Transición Ecológica, donde consideran verde cualquier actividad económica o tecnología que contribuya a la consecución de las principales metas ambientales de la Unión Europea contra el cambio climático, aunque sin causar daños ambientales significativos.
La Comisión Europea tantea la posibilidad de considerar a la energía nuclear y gas natural sostenibles por su papel hacia un futuro centrado en las renovables. Por ello, la institución pretende aprobar un acto delegado sobre este asunto tras consultar a los Gobiernos de los Veintisiete y expertos. Sin embargo, su entrada en vigor dependerá del visto bueno que reciba del Parlamento Europeo y el Consejo de la Unión Europea.
De momento, el plan de Bruselas genera división entre los países miembros. Junto a España, Alemania y Austria rechazan la propuesta. «Creo que es absolutamente incorrecto que la Comisión Europea tenga la intención de incluir la energía nuclear en la clasificación de la UE para actividades económicas sostenibles», ha comentado la ministra de Medio Ambiente alemana, Steffi Lemke. Por otro lado, Francia apoya la proposición. Se trata del segundo país del mundo en número de centrales nucleares.