Israel ha pedido a la ONU que desplace a 1,1 millones de personas en Gaza en las próximas 24 horas
SPUTNIK. Israel pidió a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que desplace a 1,1 millones de personas civiles al sur de la Franja de Gaza en las próximas 24 horas, informaron medios como AFP, Reuters y The Guardian.
Minutos después, el organismo dirigido por Antonio Guterres advirtió que «es imposible que se produzca tal desplazamiento sin consecuencias humanitarias devastadoras«.
«Las Naciones Unidas hacen un llamado enérgico para que, cualquier orden de este tipo, si se confirma, sea rescindida, evitando lo que podría transformar lo que ya es una tragedia en una situación calamitosa», señaló la ONU a través de su portavoz Stephane Dujarric.
«Los jefes de equipo de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU y del Departamento de Seguridad en Gaza fueron informados por sus oficiales de enlace en el Ejército israelí de que toda la población de Gaza al norte de Wadi Gazadebería reubicarse en el sur de Gaza en las próximas 24 horas. Esto supone aproximadamente 1,1 millones de personas. La misma orden se aplicó a todo el personal de la ONU y a las personas refugiadas en sus instalaciones, incluidas escuelas, centros de salud y clínicas», precisó.
Tel Aviv ha desplegado tanques y unos 300.000 soldados en las fronteras con Gaza, en lo que se presume podría ser el preparativo para una infiltración terrestre en el enclave palestino, que ha sido bombardeado incesantemente por las fuerzas israelíes desde que el grupo Hamás lanzó ataques sorpresa el pasado 7 de octubre en diferentes puntos de la nación hebrea.
El ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, afirmó el 10 de octubre que su país pretende realizar una «ofensiva completa» en la Franja de Gaza e incluso el suministro de energía eléctrica y alimentos a la población de ese lugar permanece interrumpido, una decisión que ha sido apoyada por Estados Unidos.
Este 12 de octubre, el Ministerio de Energía de Israel confirmó que seguirá manteniendo a Gaza sin servicios básicos, como electricidad, agua y combustibles, y que así lo hará hasta que los líderes de Hamás liberen a todos los rehenes israelíes.
«¿Ayuda humanitaria a Gaza? No se encenderá ningún interruptor eléctrico, no se abrirá ninguna boca de agua y no entrará ningún camión de combustible hasta que los secuestrados israelíes regresen a casa», escribió el ministro de esa cartera, Israel Katz, en sus redes sociales.
Según los últimos datos disponibles, la escalada de violencia ha causado unos 1.300 muertos y casi 3.300 heridos en Israel, a los que se suman más de 1.400 muertos y 6.200 heridos en Gaza, así como entre 100 y 150 personas, tanto militares como civiles, secuestradas durante el ataque en territorio israelí y retenidas como rehenes en el enclave palestino.
Además, la nueva espiral del conflicto ha desplazado a unos 339.000 gazatíes hasta ahora, según un informe publicado por la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).
Desde el 7 de octubre, 11 trabajadores de la Agencia de Naciones Unidas para la población refugiada de Palestina (UNRWA, por sus siglas en inglés) han muerto a causa de los bombardeos israelíes sobre la Franja de Gaza, de acuerdo con la ONU.
Mientras tanto, Estados Unidos y el Reino Unido ya han enviado equipo militar a la zona cercana al Medio Oriente. Washington específicamente ya envió dos portaviones al Mediterráneo oriental como muestra de disuasión para todos los enemigos de Israel. Además, el país norteamericano también entregó municiones a Tel Aviv.
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, ya se encuentra en reuniones de alto nivel con el Gobierno de Netanyahu, y el secretario de defensa, Lloyd Austin, también llegará en las próximas horas.
Por otro lado, los líderes del Oriente Medio ya mantienen conversaciones. El 11 de octubre, el presidente iraní, Ebrahim Raisi, sostuvo su primera conversación telefónica con el príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohamed bin Salman, para discutir la situación en Palestina, informó el jefe adjunto de la Administración Presidencial del país persa para Asuntos Políticos, Mohamad Jamshidi.