Agricultores europeos protestan por llegada masiva de productos de Ucrania
Trabajadores del campo de Rumania y Bulgaria salieron a las calles este viernes 7 de abril a rechazar la inundación en los mercados locales de cereal ucraniano, que según denunciaron los llevará pronto a la bancarrota.
Alrededor de 100 personas se concentraron en la capital rumana, Bucarest, mientras que largas caravanas de tractores se manifestaron a lo largo del resto del territorio rumano.
Por su parte, y siempre según información de la agencia, productores de granos en Bulgaria bloquearon con sus vehículos cruces fronterizos también en señal de rechazo al ingreso de grano ucraniano a su país.
En Bucarest, la protesta fue realizada frente a la oficina de representación de la Comisión Europea, entidad ejecutiva de la Unión Europea, donde se podía ver a manifestantes sosteniendo pancartas con las leyendas: «Nosotros somos agricultores europeos también» y «No castiguen nuestra solidaridad».
Esto es debido a que la Unión Europea decidió eliminar el año pasado los aranceles aduaneros y las cuotas de importación de productos ucranianos como una forma de ayudar financieramente al régimen de Kiev ante su conflicto con Rusia.
Esta decisión ha sido ampliamente criticada por productores y trabajadores agrícolas en países como Rumania, Bulgaria, Polonia y varios otros miembros del bloque europeo, ya que la llegada masiva de cereales y granos baratos provenientes de Ucrania desencadenó un duro golpe para su propia producción, especialmente debido a la baja del precio resultante del exceso de oferta.
En semanas previas, fueron los campesinos polacos quienes salieron masivamente a la calle en rechazo de la situación.
El propio ministro de agricultura de Polonia, Henryk Kowalczyk, debió renunciar el miércoles 5 abril para intentar desescalar la ira del sector agrícola y evitar el agravamiento de la crisis política en su país, en frontera con Ucrania e implicada en el conflicto vía la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y otros flancos.
La directora ejecutiva de la Liga de Asociaciones de Productores Agrícolas de Rumania, Liliana Piron, dijo en declaraciones recogidas por AP que los agricultores de su país han «llegado a un punto en el que sienten que ya no pueden afrontar los costos» de la «competencia desleal» ucraniana.
«Estamos a menos de tres meses de la nueva cosecha y el peligro es real, que la mercancía que tendremos lista esta temporada no se pueda vender a precios superiores a los costos de producción», afirmó Piron, advirtiendo que en poco tiempo habrá una ola de quiebras de agricultores rumanos.
Si la protesta de hoy no se escucha en Bruselas, consideraremos acciones más amplias con la participación de otros países que comparten la misma opinión», dijo por su parte el presidente de la asociación de productores de granos en Bulgaria, Iliya Prodanov.
El mes pasado, la UE se comprometió a ayudar a los agricultores de granos y cereales en Rumania, Bulgaria y Polonia con ayudas de 56,3 millones de euros (cerca de 62 millones de dólares): 16,7 millones para Bulgaria; casi 30 millones para Polonia y 10 millones para Rumanía.
Sin embargo, tanto agricultores como funcionarios del sector de los gobiernos nacionales rechazaron el ofrecimiento, diciendo que no era suficiente para compensar las pérdidas.