Alberto Fernández se enfrenta a un procurador por el proceso contra Cristina Fernández

RT. El presidente de Argentina, Alberto Fernández, afirmó este viernes que el Poder Judicial «no está exento de críticas», en respuesta a los reproches que recibió del procurador general de la nación, Eduardo Casal, por sus opiniones sobre la causa por presunta corrupción que avanza contra la vicepresidenta, Cristina Kirchner.

«El Poder Judicial, y sus magistrados y funcionarios, no están ni podrían estar exentos de críticas y opiniones en una sociedad democrática», pronunció el líder del Ejecutivo en una misiva difundida por la Casa Rosada.

El mandatario había cuestionado la tarea del fiscal Diego Luciani en el juicio que tiene como imputada a Fernández de Kirchner por presuntas irregularidades en el manejo de la obra pública en Santa Cruz entre 2003 y 2015. En el marco de esa causa, Luciani pidió para la exjefa de Estado una pena de 12 años de prisión e inhabilitación de por vida para ser funcionaria.

El presidente argentino aseguró el martes, durante una entrevista televisiva, que Fernández de Kirchner, a la que se acusa de haber encabezado una asociación ilícita que defraudó al Estado por un monto de 1.000 millones de dólares, «no cometió ninguno de los delitos que se le atribuyen».

En aquella entrevista, Alberto Fernández hizo referencia «a la existencia de una ‘persecución judicial y mediática’ contra la vicepresidenta». Y al referirse a la seguridad del fiscal Luciani, lo comparó con el caso de Alberto Nisman, cuya muerte aún se investiga. «Nisman se suicidó, yo espero que no haga algo así Luciani», dijo Alberto Fernández.

Sus dichos desembocaron en una fuerte campaña en su contra por parte de la oposición política, mediática y judicial que incluye pedidos de juicio político para que lo destituyan.

En esa misma línea, Casal consideró una «perturbación» las expresiones que el jefe de Estado formuló sobre la actuación de la Justicia.

«Debo señalar que dichas expresiones en modo alguno pueden ser interpretadas en el sentido de querer condicionar el accionar de un funcionario, y ello queda claro toda vez que fueron vertidas cuando el fiscal de la causa ya había finalizado su alegato en el proceso», aclaró el mandatario.

Además, enumeró comportamientos similares de su antecesor en el cargo, el expresidente Mauricio Macri, que no fueron cuestionados por el jefe de los fiscales.

En ese sentido, Fernández cuestionó la «doble vara para medir hechos institucionales» del procurador Casal.

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