China abre acceso público a la versión de prueba de un monedero virtual para el yuan digital
La nueva aplicación, desarrollada por el Instituto de Investigación de Monedas Digitales del Banco Popular de China, está disponible en las tiendas electrónicas chinas para los sistemas operativos Android y iOS, informa South China Morning Post.
El programa, anteriormente accesible para descargas solo mediante enlaces privados, permite abrir el billetero digital, probar su manejo y el uso de yuanes digitales, conocidos como e-CNY.
En desarrollo desde 2014, el e-CNY ha visto una serie de ensayos en varias regiones del país a partir de 2020. Así, mediante un sistema de lotería, se han repartido entre grupos limitados de la población montos progresivamente ampliados que se pueden gastar en tiendas, restaurantes y otros lugares.
Ahora cualquier persona puede descargar la aplicación y usar la versión digital del yuan en 11 áreas, incluidas las ciudades de Shanghái y Pekín. Conforme a lo anunciado en abril pasado por el Banco Popular de China, los lugares relacionados con los Juegos Olímpicos de invierno 2022 en Pekín entran en la zona de circulación de esa moneda, de manera que podrá ser utilizada durante estos eventos deportivos, que arrancan en febrero.
Aunque tiene ciertas características propias de las criptomonedas, el e-CNY no puede ser considerado como tal, ya que es emitido y controlado por el banco central -el Banco Popular de China- y, por tanto, carece de la descentralización inherente a los criptoactivos.
Según datos del Banco Popular de China, más de 140 millones de residentes habían abierto para finales de octubre pasado una cuenta en yuanes digitales, con un volumen aproximado de transacciones por el orden de 62.000 millones de yuanes (9.720 millones de dólares). Un total de 1,55 millones de comerciantes apoyan las transacciones con e-CNY en sectores que incluyen servicios públicos, banca, transporte, compras y operaciones bursátiles.
El e-CNY se puede utilizar mediante un monedero digital descargado a un móvil, tarjetas físicas de pago o dispositivos portátiles como un reloj inteligente.