La salud empieza en la comunidad, pero los centros de primer nivel no despegan
Cuando un médico familiar llega a una comunidad, su primera labor es hacer un levantamiento para detectar cuántos pacientes hipertensos hay, diabéticos, embarazadas adolescentes y de alto riesgo, y elaborar un plan estratégico para bajar los índices de esas enfermedades o condiciones.
Así lo explicó Rubén Vásquez, pasado presidente de la Sociedad Dominicana de Medicina Familiar y Comunitaria (Sodomefyc), quien entiende que la limitante en la atención primaria son las precariedades que encuentran los doctores en las Unidades de Atención Primaria(UNAP) y los Centros de Primer Nivel(CPN).
«Hay médicos que trabajan el primer nivelde atención muy bien, tienen establecido todo, pero la capacidad resolutiva de los centros no les permite hacer un buen trabajo. Tenemos muchos centros de atención primaria que no tienen insumos, que solamente tienen el escritorio, una silla y el médico», declaró.
De acuerdo con el especialista, muchas veces, por las limitaciones de personalcontratado, el médico familiar debe fungir como enfermera, promotor de salud, médico asistencial y secretario para llenar los expedientes.
Así trabajan
En el CPN Manganagua, ubicado en la calle Francisco Prats Ramírez, en el Distrito Nacional, una joven de 17 años solicitaba una consulta ginecológica, mientras, otra señora esperaba un turno para ser vacunada.
Un cartel en la sala de espera muestra la cartera básica de servicios que incluye: atención a dengue, malaria, enfermedad meningocócica, vacunaciones, atención prenatal, puerperial, planificación familiar y diagnóstico precoz de cáncer ginecológico (papanicolau).
Asimismo, prevención de riesgos cardiovasculares, diabetes, tuberculosis, infecciones de transmisión sexual, emergencias menores y entrega de medicamentos.
En el Centro 30 de Mayo —también en la capital— al momento de Diario Librevisitarlo, no se observaba flujo de pacientes, tal vez incidido por el cambio de turno y la llegada del personal vespertino. El mismo ofrece servicios de lunes a viernes, de 8:00 de la mañana a 4:00 de la tarde.
Ninguno de los médicos presentes ni el personal administrativo quiso hablar con este diario sobre los servicios ofrecidos, argumentando que necesitaban autorización del director del centro.
En el caso del centro La Feria, frente al Hospital Robert Reid Cabral, un adolescente de 15 años se negaba a recibir una inyección para bajarle la hinchazón luego de presentar una reacción alérgica.
Mercedes Contreras, colaboradora del local, explicó que las consultas de pediatría, medicina general y medicina familiar son las más demandadas, aunque es una unidad más completa que otras, incluyendo cardiología, psicología y odontología.
Al preguntarle sobre cómo Pediatría tiene alta demanda teniendo un hospital infantil de tercer nivel justo al frente, Contreras detalló que la Unidad de Atención Primaria se creó con la finalidad de «desahogar el sistema«, reduciendo así la carga en el hospital.
«Hay días que vienen muchos pacientes, a veces medio y otros que no viene ninguno«, dijo sobre el volumen de personas que demandan servicios en este local.
Otra barrera es la falta de equipos y materiales básicos de trabajo. Ya que el médico de familia atiende al 80 % de las enfermedades crónicas, como diabetes, hipertensión, infecciones virales y comunitarias, así como afecciones en los infantes.
«Debemos tener un laboratorio pequeñoque haga un hemograma, una glicemia o una radiografía rápida para que los pacientes no se vayan a los otros niveles», acotó el pasado presidente de la Sociedad Dominicana de Medicina Familiar y Comunitaria .
Vásquez destacó que no todos los centros se encuentran en las mismas condiciones, ya que algunos están mejor habilitadosque otros.
CMD: se necesitan 6,000 centros
Según declaraciones recientes del presidente del Colegio Médico Dominicano (CMD), Waldo Ariel Suero, en la práctica, «el primer nivel de atención primaria no existe» en el país, siendo necesaria la creación de al menos 6,000 centros a nivel nacional. El inventario actual que ronda las 1,900 unidades.
«El país necesita muchos más centros de primer nivel de atención, porque los que tenemos no cumplen con el cometido para nosotros tener cubierta a toda la población«, dijo el doctor Vásquez al respecto.
Detalló que, al ser la cabeza del centro de atención, el médico familiar tiene capacidad para gestionar hasta 500 familias en una comunidad, cada una con un promedio de siete personas, unos 3,500 pacientes.
«Somos una especialidad clínica, integral, holística, especialistas en personas. Es una especialidad que se realiza en tres años. También damos el servicio comunitario visitando a los pacientes encamados, pacientes que son minusválidos, que no pueden trasladarse al centro», resaltó.
«La atención primaria solamente en discurso se queda, no hay voluntad política de arrancar con ella», opinó.