México registra el día más violento en lo que va de año, a pesar de las medidas de aislamiento social por el coronavirus
RT. El domingo 7 de junio, México registró el día más violento del año, con 117 asesinatos, según el reporte preliminar que diariamente publica el Gobierno federal. En tan solo un fin de semana, se cometieron 271 homicidios dolosos en el país latinoamericano.
La violencia en México no ha cesado, pese a las medidas de confinamiento social decretadas en los 32 estados del país para detener la epidemia del coronavirus, que hasta este domingo se había cobrado la vida de 13.699 personas, con 1.175 decesos en espera de ser analizados.
«Ayer [domingo] hubo como diez asesinados, solo en Irapuato», dijo este día el presidente Andrés Manuel López Obrador, al ser cuestionado en su conferencia de prensa diaria sobre la incidencia delictiva en el país.
El mandatario explicó que ha habido una disminución en la incidencia delictiva en los estados del sureste de México. No obstante, admitió que los homicidios se concentran principalmente en cinco entidades, una de ellas Guanajuato (centronorte de México), que el sábado 6 de junio registró 24 de los 94 homicidios dolosos contabilizados ese día en todo el país.
López Obrador dijo que han desplegado a muchos elementos de la Guardia Nacional a Guanajuato para pacificar el estado. «Pero está arraigado, muy arraigado el problema. Desde luego que vamos a garantizar la paz, la tranquilidad, va a llevar tiempo», aseguró el mandatario.
Recientemente, el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo, habló de una «inercia histórica» de violencia que abarca hasta estos días. En su cuenta de Twitter, el funcionario federal atribuyó la «tragedia» a los Gobiernos anteriores, «que hicieron de la fuerza, por años, el instrumento único, exclusivo y excluyente, del combate a la criminalidad».
«El saldo fue de centenares de miles de muertos, de desaparecidos forzados y de torturados», tuiteó Durazo.
Cuatrimestre violento
Entre enero y abril de este año —las cifras consolidadas más recientes del Gobierno federal—, las Fiscalías de los 32 estados del país abrieron 9.751 carpetas de investigación por homicidio doloso; esto es, un promedio de 80 asesinatos cada día.
Las medidas de aislamiento social para evitar la propagación del coronavirus, anunciadas desde el pasado 17 de marzo, no impidieron que se registrara un cuatrimestre muy violento, que superó al mismo período de 2019, cuando se contabilizaron 9.605 carpetas por homicidio doloso de enero a abril.
La semana pasada, López Obrador anunció que para el próximo año desplegarán 150.000 elementos de la Guardia Nacional —un cuerpo mixto de Policías y Fuerzas Armadas—, a través de 266 coordinaciones a lo largo del territorio nacional, con el objetivo de «garantizar la paz y la tranquilidad«.
No obstante, como ha documentado la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA, por sus siglas en inglés), el despliegue de «soldados mexicanos en todo el país para patrullar las calles y combatir el crimen organizado tampoco ha logrado reducir el crimen y la violencia».
En paralelo, mediante programas sociales, que incluyen becas a jóvenes y población vulnerable, el Gobierno de López Obrador intenta detener una violencia que rompe récords año con año.
A la par de la ola de homicidios, el país latinoamericano registra una crisis de desapariciones desde finales de 2006, fecha en que el expresidente Felipe Calderón Hinojosa declaró la «guerra contra el narcotráfico». Según cifras del Gobierno mexicano, hay 61.637 personas desaparecidas, 873 fosas clandestinas miles de cuerpos sin identificar.