México sigue sin lograr bajar inflación a niveles normales
Ciudad de México, 25 dic (Prensa Latina) México sigue sin lograr bajar la inflación a niveles normales y busca hoy la coordinación con el sector privado para intentar controlar los precios mediante decreto gubernamental.
El gobierno federal anunció mediante nota de prensa la Secretaría de Economía que prepara un nuevo decreto antiinflacionario, el cual sumará más insumos y productos de los contemplados en el Acuerdo de Apertura Contra la Inflación y la Carestía.
Busca el apoyo de la iniciativa privada, con la cual ya trabaja, para apoyar y concretar el nuevo decreto.
Un día después de que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía dio a conocer que la inflación repuntó en la primera quincena de diciembre, para ubicarse en 7.7 por ciento a tasa anual.
La dependencia a cargo de Raquel Buenrostro señaló que ya se realizan reuniones con otras áreas del Gobierno federal para lanzar la tercera fase de las medidas contra la carestía.
De acuerdo con un mensaje publicado en Twitter, funcionarios revisaron en las instalaciones de la SE “el decreto antinflacionario para sumar más insumos, productos alimenticios y de higiene personal”.
La misma publicación señala que la vigencia del acuerdo se extenderá hasta el 31 de diciembre de 2023, luego de que el Apecic –sucesor del Paquete contra la inflación y la carestía (Pacic)– concluirá en febrero del próximo año.
Debido al alza en los precios de alimentos y productos básicos como consecuencia de la pandemia de Covid-19 y, sobre todo, de la crisis alimentaria y energética que provocó el conflicto entre Rusia y Ucrania, el Ejecutivo nacional lanzó en mayo pasado el Pacic.
El paquete, acordado con el sector privado, contenía 16 medidas como estabilización del precio de gasolina y diésel, precio referencial al gas licuado de petróleo, electricidad, seguridad en carreteras y aranceles cero a la importación de productos básicos e insumos, entre otras.
Todo ello con el objetivo de estabilizar precios de 24 productos (22 alimentos y dos de primera necesidad) y aumentar la producción interna de alimentos.
Ante la persistencia de la inflación global, que llegó a ubicarse en 8,8 por ciento en la primera quincena de septiembre, a principios de octubre pasado relanzó el acuerdo, pero en esta ocasión con la participación voluntaria de empresas productoras y distribuidoras específicas.
La segunda versión del pacto también incluyó a los 24 productos básicos e insumos que garantizaran que disminuyera 8,0 por ciento el precio máximo de la canasta básica, la cual no debe sobrepasar los mil 39 pesos (52 dólares).
El Gobierno otorgó a empresas una licencia única universal que las exime de todo trámite o permiso para las actividades de importación y distribución de alimentos e insumos para su envase, incluyendo los servicio de sanidad, inocuidad y calidad,y de la Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios, y el impuesto general de importación.
Dicha licencia, de acuerdo con el mensaje publicado en Twitter, se otorgará a más empresas en la nueva versión del convenio.
Lo anterior ocurre en medio del repunte de los precios en los primeros 15 días del último mes del año, periodo en el que diversas empresas anunciaron el encarecimiento de productos.
