Nayib Bukele confirma postulación para presidenciales de 2024 pese a que la Constitución salvadoreña prohíbe la reelección
RT. El partido oficialista Nuevas Ideas confirmó que el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, volverá a presentarse en las elecciones generales del próximo año.
La postulación, que fue ratificada la noche del domingo, está rodeada por una fuerte polémica debido a su legalidad, ya que la Constitución del país sudamericano prohíbe expresamente la reelección, pero los magistrados –cuya designación fue facilitada por el partido oficialista– emitieron una resolución que habilita a Bukele para presentarse.
«Finalizando el día, comunicamos al pueblo salvadoreño que el presidente y el vicepresidente [Félix Ulloa] ya están inscritos como precandidatos (…) en el partido más grande de la historia de El Salvador. Las Nuevas Ideas son invencibles«, anunció la organización política en sus redes sociales al mostrar las solicitudes de registro.
Bukele y Ulloa participarán primero en las elecciones internas que Nuevas Ideas llevarán a cabo el próximo 9 de julio y en la que también se elegirán a los candidatos a diputados del Parlamento Centroamericano y de la Asamblea Legislativa, y a consejeros municipales.
Sin embargo, se prevé que en realidad no tendrán competencia interna de peso, sobre todo porque Bukele –quien el pasado 1 de junio cumplió cuatro años en el cargo– tiene récord de popularidad a nivel nacional, lo que facilita su avance rumbo a las presidenciales del próximo 4 de febrero.
La controversia estalló en septiembre de 2021, cuando cinco magistrados de la Sala de lo Constitucional emitieron una sorpresiva resolución que permite la reelección, con el argumento de que solamente «el pueblo» tiene la potestad de decidir si quiere o no que el presidente continúe en su cargo.
El único requisito que impusieron fue que Bukele renunciara a la presidencia cinco meses antes de volver a presentarse, lo que implica que tendría que dejar el cargo en septiembre próximo, pero ello no está firme.
Cambios
Según argumentaron los magistrados, la reelección se prohibió constitucionalmente por requerimientos de hace décadas que no sirven en el contexto actual.
«Es una excesiva restricción disfrazada de certeza jurídica y el actuar de representantes que se resisten al cambio del soberano, que se resisten a escuchar la voluntad del pueblo», señalaron.
Un año más tarde, en septiembre de 2022, Bukele confirmó su postulación. «Luego de conversar con mi esposa Gabriela y mi familia, anuncio al pueblo salvadoreño que he decidido correr como candidato a la residencia de la República», dijo durante una cadena nacional en la que conmemoraba la Independencia de El Salvador.
El registro que reveló su partido oficializó sus intenciones de convertirse en el primer presidente del país centroamericano que buscará un segundo mandato consecutivo.
La postulación está rodeada por una fuerte polémica debido a su legalidad.
Constitución del país sudamericano prohíbe la reelección, pero los magistrados –cuya designación fue facilitada por el partido oficialista– emitieron una resolución que habilita a Bukele para presentarse.
Bukele participará primero en las elecciones internas que Nuevas Ideas llevarán a cabo el próximo 9 de julio.
Además según el decreto aprobado, a partir de la próxima legislatura se reduce de 84 a 60 el número de diputados del Congreso.
La reelección está expresamente vedada en cuatro artículos de la Constitución que establecen que no pueden ser candidatos a la presidencia quienes hayan ocupado ese cargo por más de seis meses, consecutivos o no, durante el período inmediato anterior, o dentro de los últimos seis meses anteriores al inicio del período presidencial.
También sanciona a quienes promuevan la alteración de este orden institucional.
«Pierden los derechos de ciudadano los que suscriban actas, proclamas o adhesiones para promover o apoyar la reelección o la continuación del Presidente de la República, o empleen medios directos encaminados a ese fin», señala el artículo75 de la Carta Magna.
Por otra parte, el texto indica que la única forma de proteger el sistema democrático de Gobierno es garantizando la alternancia. «La violación de esta norma obliga a la insurrección», advierte.