Sector agropecuario no logra recuperar niveles de empleo previos a la pandemia
El sector agropecuario de República Dominicana cerró el 2023 con 366,417 personas empleadas, representando el 7.4% de la población ocupada total. A pesar de su relevancia en el mercado laboral, el sector aún no ha alcanzado los niveles de empleo previos a la pandemia de covid-19, revela el informe: “Desempeño del sector agropecuario de la Republica Dominica 2023”, realizado por el Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo (MEPyD).
El documento señala que el empleo agropecuario ha mostrado fluctuaciones en los últimos años. En 2017, impulsado por un crecimiento interanual del 5.9% en las actividades del sector, experimentó un aumento en la población ocupada. Sin embargo, esta tendencia se desaceleró en los años siguientes debido a la ralentización del crecimiento económico y el impacto de la pandemia.
A pesar de la recuperación económica general en 2023, la población ocupada en el agro siguió por debajo de los niveles registrados antes de la crisis sanitaria. La alta informalidad y los bajos ingresos del sector han contribuido a que muchos trabajadores migren hacia otras actividades económicas con mejores condiciones laborales.
La productividad laboral agropecuaria ha crecido a un ritmo del 7.8% anual entre 2016 y 2023, superando a sectores como la industria y el comercio. No obstante, este avance no ha sido suficiente para revertir la disminución del empleo en el sector ni para cerrar la brecha con actividades más dinámicas como el turismo y la manufactura.
El MEPyD indica que el sector enfrenta, además, dificultades estructurales, como la prevalencia de pequeñas explotaciones agrícolas, lo que limita la formalización del empleo y el acceso a financiamiento. Según el pre-censo Nacional Agropecuario de 2015, el 56.9% de las unidades productivas cuentan con menos de 40 tareas de tierra, una situación que contribuye a la alta informalidad del trabajo agropecuario.
A estas condiciones se suma la emigración interna de la población rural hacia zonas urbanas, lo que reduce la disponibilidad de mano de obra en el sector. Provincias como San Juan, Monte Plata y Duarte han registrado tasas de emigración interna del 52.6%, 44% y 33.8%, respectivamente, impactando la oferta laboral en actividades agrícolas.
PED.