La destitución de Galant como titular de Defensa de Israel es un «mensaje claro de fracaso»
Karen Fabián
La destitución de Yoav Galant como ministro de Defensa «es un mensaje claro del fracaso de Israel» en Oriente Medio, dijo a Sputnik el analista político Daniel Lobato. «Los prisioneros no han sido liberados porque Israel no ha querido continuar los intercambios (…) y Hamás continúa haciendo acciones de resistencia contra el Ejército ocupante».
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, destituyó a Yoav Galant como ministro de Defensa y nombró en su lugar al entonces canciller, Yisrael Katz, el 5 de noviembre, el mismo día en que Estados Unidos, el principal aliado del país hebreo, celebró sus elecciones presidenciales.
En palabras de Netanyahu, su decisión se sustentó en «diferencias significativas» con Galant en la manera de abordar las acciones militares en la Franja de Gaza, así como en la pérdida de confianza mutua.
«Hice muchos intentos por salvar estas diferencias, pero siguieron ampliándose. También llegaron a la opinión pública de forma inaceptable y, lo que es peor, llegaron al enemigo. Nuestros enemigos lo disfrutaron y se beneficiaron mucho de ello», declaró Netanyahu.
Añadió que cuando la crisis de confianza entre él y Galant se supo a nivel público, esto se convirtió en un obstáculo para «continuar adecuadamente la dirección de la campaña» militar en curso en Oriente Medio.
Tras darse a conocer la noticia, el exministro de Defensa Benny Gantz —quien a principios de junio anunció la retirada de su partido de la coalición gobernante y llamó a convocar a elecciones anticipadas— aseveró que se trató de una decisión política a costa de la seguridad del país hebreo. Mientras que, convocados por el líder de la oposición, Yair Lapid, del partido centrista Yesh Atid (Hay Futuro), centenares de israelíes salieron a las calles de Tel Aviv en protesta por el despido de Galant y para exigir la liberación de los rehenes tomados por Hamás el 7 de octubre de 2023.
En entrevista con Sputnik, el analista internacional Daniel Lobato consideró que la destitución de Galant es un «mensaje claro de fracaso», toda vez que los objetivos que anunció Netanyahu tras el ataque sorpresa de Hamás no han sido alcanzados pese a la devastación masiva del enclave, sumada a un «asedio medieval por hambre, sed y enfermedades» prevenibles en contra de la población palestina.
«La realidad es que los objetivos de Netanyahu y Galant no se han cumplido. Esos objetivos declarados el día 7 de octubre de 2023 eran recuperar a los prisioneros israelíes en manos de la resistencia palestina y acabar con Hamás», señaló Lobato.
«Y luego está el otro objetivo que es fundamental, sobre la devastación y el exterminio en [la Franja de] Gaza. Es el tercer objetivo, nunca declarado abiertamente por Netanyahu ni Galant, que es la expulsión o el exterminio directo de los dos millones y medio de palestinos de Gaza (…). Y ese objetivo no declarado, tampoco lo ha logrado», añadió.
La derrota en el Líbano»
A la derrota israelí en la Franja de Gaza se suman «la derrota en el Líbano y la derrota contra Irán (…) a pesar de las promesas, también de Netanyahu, de restaurar el orden y la normalidad en las colonias israelíes», dijo Lobato.
Israel se encuentra en una guerra no declarada con el movimiento chií Hizbulá desde el 8 de octubre de 2023, cuando la milicia libanesa comenzó a lanzar misiles y drones suicidas hacia las comunidades del norte del país hebreo, en solidaridad con el movimiento palestino Hamás tras su incursión armada en Israel.
Desde entonces, decenas de miles de colonos israelíes han sido desplazados a otras zonas del país, al igual que decenas de miles de residentes libaneses, que se vieron forzados a desplazarse hacia Siria y otras regiones circundantes.
En ese contexto, Lobato remarcó que este objetivo tampoco se ha conseguido «y no solo no se ha logrado esa normalidad en las vacías colonias (…) sino que la anunciada invasión del Líbano está siendo una catástrofe en pérdidas de soldados, de vehículos militares, solo han avanzado 500 metros en territorio libanés, los israelíes, a un costo altísimo».
Mientras que, con respecto a Irán, el experto consideró que Israel también ha fracasado, «a pesar de los ataques salvajes, terroristas, de destruir un consulado (…), los asesinatos selectivos, por ejemplo, de Ismaíl Haniyá, el líder de Hamás, en Teherán» y otros.
«Esa derrota ante Irán, que Irán ha dado unas respuestas de alto nivel (…), no son más que el cúmulo de derrotas que ha motivado la destitución de Yoav Galant ante el fracaso militar israelí», analizó Lobato.
Yisrael Katz, un apologeta del genocidio
Tras destituir a Galant de la cartera de Defensa, Netanyahu nombró en su lugar al entonces canciller, Yisrael Katz, quien a principios de octubre declaró persona non grata al secretario general de la ONU, Antonio Guterres, luego de que el alto funcionario condenó la expansión del conflicto en Oriente Medio.
«El ministro de Exteriores israelí, Yisrael Katz, anunció hoy [2 de octubre] que declaró persona non grata al secretario general de la ONU, Antonio Guterres, y le prohibió entrar al país», indicó la Cancillería del Estado hebreo en un comunicado.
Según Katz, Guterres no condenó inequívocamente el ataque iraní con unos 200 misiles del 1 de octubre y, además, acusó al secretario general de apoyar a Hamás.
En ese sentido, Lobato observó que el ahora ministro de Defensa, Yisrael Katz, ha promovido «el genocidio completo, el exterminio completo en Gaza, de los dos millones de palestinos» que habitan en el enclave.
Lo anterior a pesar de que, en su sentencia de finales de enero, la Corte Internacional de Justicia le ordenó a Israel adoptar medidas inmediatas y efectivas para evitar el genocidio del pueblo palestino en la Franja de Gaza, al que ha privado de alimentos y suministros vitales.
«Las declaraciones de Katz, promoviendo el genocidio completo, forman parte de la resolución de la Corte Internacional de Justicia, [pero] las medidas cautelares no se han cumplido, desacatadas tanto por Israel como por Estados Unidos, las medidas cautelares de la corte más importante del planeta», señaló el analista internacional.
Así, concluyó que quien queda al frente del Ministerio de Defensa «es una persona que ha hecho una apología del genocidio, que está [la apología] en esos documentos de la Corte Internacional de Justicia, es un apologeta del genocidio, eso nos da una idea».
Cuestionado sobre las implicaciones en el conflicto del regreso de Donald Trump a la Casa Blanca, Lobato ponderó que esto no va a suponer un cambio en el apoyo al régimen israelí.
«Hay que entender que Estados Unidos se juega no solo la colonia israelí en Palestina, una fortaleza colonial portaaviones, sino que se juega todo un esquema de dominación», señaló Lobato.
Y añadió que Washington se juega todo un esquema de dominación, toda vez que alrededor de la Palestina ocupada hay «una muralla protectora» al servicio de esa colonia israelí.
«Como en otras colonias en el pasado, como Sudáfrica con el apartheid, que no solo se cayó Sudáfrica, [sino que] se cayeron otros regímenes que había alrededor (…), pues aquí hay un esquema también de una fortaleza, un castillo colonial», analizó Lobato.
El genocidio es el fracaso de la colonización
El experto concluyó que la etapa del genocidio, de la misma forma que el perpetrado por Francia y Estados Unidos en Vietnam o el de París en Argelia, es la última etapa del fracaso de una colonización.
«Estamos en esos mismos momentos históricos, la etapa del genocidio en Palestina es la etapa del fracaso de la colonia que ha durado 76 años, como la de Argelia por Francia, [que duró] 132 años y como la de Vietnam por Francia y Estados Unidos, pues duró también varias décadas del siglo», finalizó Lobato.