Los juegos del hambre: los precios de los alimentos superan sus máximos históricos
PÁGINA12. El índice de precios de los alimentos de la FAO, entidad que depende de Naciones Unidas, se situó en marzo de 2022 en el nivel más elevado desde la creación de la serie, en 1990. El indicador anotó un promedio de 159,3 puntos, lo cual implica un alza del 12,6 por ciento en relación a febrero. Se trata de un salto «gigantesco», definió la FAO, que impactó en la inflación a lo largo y ancho del planeta. Se registran precios máximos históricos en aceites vegetales, cereales y carne, mientras que también muestran fuertes alzas el azúcar y los productos lácteos.
Junto a la disparada de los precios de la energía y sobre la aceleración de precios que se produjo en la salida de la pandemia, el mundo vive una situación inflacionaria inédita al menos desde comienzos de los ’80. En Alemania, la inflación interanual en marzo marcó un 7,3 por ciento, récord desde la reunificación, mientras que en España está en el 9,8 por ciento anual. En Estados Unidos, es del 7,9 por ciento, máximo desde la crisis del petróleo durante la presidencia de Reagan, y en Brasil, del 11,7.
La economía argentina viene de un piso de inflación sustancialmente más alto, por lo cual la aceleración de precios la puede llevar al umbral del 60 por ciento.Del impacto inicial por el lado del trigo y derivados, desde la Secretaría de Comercio ya alertan sobre fuerte impacto de derivados del maíz, incluyendo carne aviar y de cerdo, lácteos e insumos difundidos como vidrio, cartón y aluminio.
Cereales
«El aumento de marzo obedeció a una subida repentina de los precios mundiales del trigo y los cereales secundarios, impulsada en gran medida por las perturbaciones relacionadas con el conflicto de las exportaciones de Ucrania y, en menor medida, de la Federación de Rusia. La probable pérdida de exportaciones de la región del Mar Negro agravó la ya escasa disponibilidad mundial de trigo. La preocupación sobre la situación de los cultivos en los Estados Unidos de América también contribuyó a que los precios mundiales del trigo subieran marcadamente en marzo, disparándose en un 19,7 por ciento», indica el informe, que se dio a conocer este viernes.
Después de subir un 20,4 por ciento en marzo, los precios internacionales de los cereales secundarios marcaron un récord y los precios del maíz, la cebada y el sorgo alcanzaron su respectivo nivel más elevado registrado desde 1990. Las expectativas de una reducción significativa de las exportaciones de maíz de Ucrania, uno de los principales exportadores, además de los elevados costos de la energía y de los insumos, contribuyeron a un aumento intermensual del 19,1 por ciento de los precios mundiales del maíz. La fortaleza de los mercados de maíz influyó en otros cereales secundarios y los precios del sorgo aumentaron un 17,3 por ciento, mientras que las incertidumbres sobre los suministros acentuaron la presión sobre los mercados de cebada», agrega la FAO. La nota que contrasta por ahora la da el arroz, que tuvo poca variación respecto de los niveles de febrero y sigue un 10 por ciento por debajo de su valor del año anterior.
Aceites vegetales
El índice de precios de los aceites vegetales de la FAO se situó en un promedio de 248,6 puntos en marzo, lo cual representa un aumento del 23,2 por ciento respecto de febrero, un nuevo récord histórico. La pronunciada subida del índice se vio impulsada por el aumento de los precios de los aceites de girasol, palma, soja y colza.
«Las cotizaciones internacionales del aceite de girasol aumentaron de forma sustancial en marzo, impulsadas por la disminución de los suministros para la exportación en medio del actual conflicto en la región del Mar Negro. Entretanto, los precios de los aceites de palma, soja y colza también subieron marcadamente, como consecuencia de la creciente demanda mundial de importaciones tras las perturbaciones del suministro de aceite de girasol. Evidentemente, los valores volátiles y más elevados del petróleo crudo también empujaron al alza los precios internacionales de los aceites vegetales«, explica la FAO.
Lácteos
En el caso de los lácteos, la FAO registró un promedio de 145,2 puntos en marzo, un alza 2,6 por ciento. Esto es el séptimo mes consecutivo de aumento y empuja al índice a un valor que está 23,6 por ciento por encima de su valor de hace un año.
«Los precios de los productos lácteos mantuvieron su tendencia al alza, respaldados sobre todo por la creciente escasez en los mercados mundiales como consecuencia de que la producción lechera en Europa occidental y Oceanía fuera insuficiente para satisfacer la demanda mundial. Las cotizaciones de la mantequilla y las leches en polvo subieron de forma pronunciada, sustentadas por el aumento repentino de la demanda de importaciones respecto de las entregas a corto y largo plazo, especialmente de los mercados asiáticos, y por la elevada demanda interna en Europa occidental. Entretanto, si bien los mercados del queso también se enfrentaban a una situación de escasez de la oferta debido a la fuerte demanda interna en Europa occidental, el valor del índice experimentó un ligero descenso como consecuencia de los efectos de las fluctuaciones de los tipos de cambio», describe la entidad dependiente de la ONU.
Carne
El índice de precios de la carne subió 4,8 por ciento frente a febrero y alcanzó un máximo histórico. En el caso de la carne de cerdo, se dio el aumento mensual más acusado registrado desde 1995, a causa de la escasez de la oferta de cerdos de matanza en Europa occidental y a una subida repentina de la demanda interna con motivo de las próximas festividades de Pascua.
«Los precios internacionales de la carne de aves de corral se reforzaron, impulsados por la disminución de los suministros en los principales países exportadores tras los brotes de gripe aviar, así como por la imposibilidad de Ucrania de exportar carne de aves de corral en medio del actual conflicto. Los precios de la carne de bovino también se reforzaron, al persistir la escasez de la oferta de ganado listo para el sacrificio en algunas de las principales regiones productoras mientras que la demanda mundial se mantuvo elevada», detalla el documento.
Azúcar
En el caso del azúcar, el avance mensual en marzo fue del 6,7 por ciento y del 20 por ciento anual. «El repunte de las cotizaciones internacionales del azúcar en marzo obedeció principalmente al aumento pronunciado de los precios internacionales del petróleo crudo, que reforzó las expectativas sobre un mayor uso de caña de azúcar para producir etanol en el Brasil en la próxima campaña. Los precios mundiales del azúcar recibieron un estímulo adicional a raíz del continuo fortalecimiento del real brasileño frente al dólar de los EE.UU., que tiende a limitar las ventas de los productores debido a la menor rentabilidad en moneda local. Sin embargo, la buena marcha de la cosecha y las perspectivas favorables para la producción en la India, uno de los principales exportadores de azúcar, contribuyeron a suavizar el alza de los precios e impidieron mayores aumentos mensuales», dice la FAO.