Pensar siempre en el objetivo principal
Antonio Florián.
Al formular una estrategia política la dirección del partido y sus principales dirigentes debemos prestar atención siempre al objetivo principal, pues como se sabe, identificarlo y alcanzarlo constituye la meta de la organización, en este caso el objetivo o propósito principal del partido es ganar las elecciones del 2024 y colocar como primer mandatario de la República al compañero presidente Leonel Fernández.
Alcanzado este propósito, el objetivo cambiará y desde el gobierno nos dedicaremos a transformar el país, impulsando una segunda ola de transformaciones que traiga prosperidad, progreso, democracia real y bienestar a los dominicanos y dominicanas.
En este transitar no hay, ni puede haber nada más importante. De ahí, lo correcto es establecer una política de acumulación de fuerzas en la que se hace necesario pactar alianzas, acuerdos y compromisos con partidos y personas con las que políticamente tenemos diferencias e incluso nos disputamos un mismo espacio. Las alianzas se establecen y practican entre fuerzas políticas, sectores y personas que mantienen diferencias, algunas de ellas serán diferencias incluso antagónicas, pero que en un momento determinado esas contradicciones o diferencias pasan a ocupar un lugar secundario de forma coyuntural, pues dicha alianza se hace necesaria para alcanzar el objetivo principal.
En la actualidad trabajamos en un proceso de acumulación de fuerzas, en la construcción de una mayoría para sacar del poder a grupos oligárquicos que los detentan. Trabajamos para consolidar la democracia real en el pais, incluyendo a las mayorías en el disfrute del bienestar y hacer parte del progreso y la prosperidad, por ello, no podemos perder nunca de vista el objetivo principal, de ahí que las diferencias, enemistades y otros aspectos de tipo emocionales que hayamos vivido en la lucha política reciente no pueden ser obstáculo que impida una alianza táctica coyuntural. La ley de unidad y lucha de lo contrario está presente en todo tipo de alianzas, nos unimos en un propósito común para enfrentar un tercero, pero esa unidad no implica que hayan desaparecido las diferencias y contradicciones.
En el caso de la alianza opositora por el “RESCATE RD” es importante identificar las debilidades, pero también las fortalezas, las amenazas, y por igual las oportunidades. El análisis entonces, no puede ser unilateral basado en emociones, recelos y temores sino, y fundamentalmente en la realidad objetiva. Naturalmente, todo proceso de alianza implica riesgos y este no es la excepción, como ya dijimos en el marco de la misma nos disputamos el espacio principal para gobernar el pais y debemos demostrar que Fuerza del Pueblo constituye la principal organización política de oposición y Leonel Fernández el principal líder del pueblo dominicano. Es sin duda un gran desafío, un enorme reto, pero la victorias se construye justamente venciendo retos y desafíos de esa magnitud, una vez identificados Luis Abinader, el PRM y sectores de la oligarquía como el blanco principal, nos obliga a unir la mayor cantidad de fuerzas políticas para derrotar al gobierno y su política de improvisación y de entrega a los intereses de grupos minoritarios.
Debemos siempre buscar la verdad en los hechos y los hechos dicen que Leonel Fernández es el líder de la oposición, es el candidato destinado a derrotar a Luis Abinader y que FUERZA DEL PUEBLO es la segunda fuerza política del pais, al menos, eso indican las encuestas, por lo tanto, adoptando la práctica de la guinea en el marco de la alianza, debemos dormir con un ojo abierto y otro cerrado, pero nunca dejar de trabajar para fortalecer una lianza opositora destinada a derrotar el enemigo principal, que lo es sin duda; Luis Abinader, el PRM y los sectores oligárquicos que representan.