Un acercamiento a América Latina y el Caribe durante 2024
El continente americano vivió en el ámbito político durante 2024 comicios presidenciales cruciales que marcaron el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca, confirmaron la reelección de Nicolás Maduroen Venezuela y convirtieron a Claudia Sheinbaum en la primera mujer al frente de la presidencia de México.
Problemas a lo interno como el aumento de la violencia y la inseguridad impactaron de forma significativa en la economía de sus países en los últimos doce meses. La región despidió, además, un año cargado de solidaridad con Palestina.
América vivió un intenso calendario electoral durante 2024
Seis países de América Latina celebraron elecciones presidenciales en el 2024. El primer semestre del año fue testigo de comicios generales en El Salvador (4 de febrero), Panamá (5 de mayo), República Dominicana(19 de mayo) y México (2 de junio). Mientras, Venezuela (28 de julio) y Uruguay (27 de octubre) fueron a las urnas en el segundo semestre. El intenso calendario comicial cerró en América del Norte con los comicios en Estados Unidos (5 de noviembre).
- Venezuela: uno de escenarios electorales más complejos
Las elecciones presidenciales en Venezuela se desarrollaron en un complejo escenario político marcado por los planes de boicot de la oposición para poner en duda la “legitimidad democrática” del presidente Nicolás Maduro.
Con el voto a su favor de seis millones 408 mil 844 electores (51, 95 por ciento), el candidato del Gran Polo Patriótico fue declarado como vencedor frente a otros nueve contendientes. Su más cercano contrincante, el opositor de la Plataforma Unitaria Democrática, Edmundo González, logró cinco millones 326 mil 102 votos para el 43,18, por ciento de las boletas.
En un intento de golpe de Estado para desconocer la victoria de Maduro, la extrema derecha promovió la violencia como parte de un plan para desestabilizar el país.
Pagados con dinero del narcotráfico, grupos delincuenciales llamados “comanditos” y paramilitares infiltrados desde el exterior protagonizaron actos vandálicos que incluyeron ataques contra el transporte público, agresiones a ciudadanos chavistas y asaltos a instituciones oficiales venezolanas.
Las acciones fascistas estuvieron acompañadas por una brutal campaña de odio a través de la maquinaria comunicacional. Venezuela fue víctima de ataques cibernéticos desde el exterior, sin precedentes en el mundo. Tan solo el 28 de julio, en medio de las elecciones presidenciales, se registraron 30 millones de ataques por minuto equivalente a 500 mil por segundo.
En tanto, la comunidad internacional se dividió por una parte entre los que no reconocieron los resultados electorales como el alto representante de la Unión Europea, Josep Borrell, y los gobiernos de Joe Biden en Estados Unidos, Daniel Noboa en Ecuador, Gabriel Boric en Chile o Javier Milei en Argentina, y los que mostraron su total apoyo como China, Cuba, Honduras, Nicaragua y Rusia.
Frente a esta trama golpista, el pueblo venezolano se movilizó de forma permanente en las calles en defensa de la democracia, la paz y el diálogo. El acompañamiento masivo en todo el país representó un mensaje contundente de la ciudadanía a favor de la institucionalidad democrática.
Sin embargo, el opositor Edmundo González aún insiste, desde Madrid, en que asumirá la presidencia de Venezuela, acompañado por María Corina Machado. Uno en el exilio y otra en la clandestinidad, ambos políticos contradicen así la voluntad del pueblo que eligió mediante el voto a Nicolás Maduro como mandatario de la República Bolivariana para el periodo 2025-2031.
- Panorama electoral en El Salvador, México, República Dominicana, Panamá y Uruguay
El presidente Nayib Bukele logró en El Salvador su reelección por amplio margen. Al frente del Partido Nuevas Ideas obtuvo dos millones 701 mil 725 votos válidos, equivalentes al 84,65 por ciento del total de sufragios emitidos.
Sin embargo, su designación estuvo envuelta en polémica por su carácter anticonstitucional: la carta magna salvadoreña prohíbe a los presidentes buscar un nuevo mandato consecutivo de cinco años.
Mientras el Partido Morena de Méxicoaseguró su continuidad para el periodo 2024-2030 con la elección histórica de Claudia Sheinbaum como presidenta.
Con casi 35 millones 924 mil 519 votos obtenidos, lo que representó el 59,76 por ciento, se convirtió en la primera mujer en asumir el cargo y en la candidata más votada en la historia reciente del país, con una amplísima ventaja frente a sus rivales.
En República Dominicana, Luis Abinader también fue reelegido para otro ciclo de cuatro años con el 57,45 por ciento de los votos. El mandatario, fundador del Partido Revolucionario Moderno consiguió más de 2,5 millones de los 4,4 millones de votos emitidos.
Los presidentes electos en El Salvador, República Dominicana y México no solo ganaron con amplios márgenes (todos por encima del 50 por ciento), sino que también aseguraron mayorías significativas en sus respectivos congresos.
No sucedió igual en Panamá donde el candidato del Partido Realizando Metas, José Raúl Mulino, fue declarado presidente con apenas el 34,23 por ciento del total de los votos válidos.
Tras cinco años de gobierno en el poder del centroderechista Partido Nacional, Uruguay vivió el regreso del Frente Amplio a la presidencia con el liderazgo del izquierdista Yamandú Orsi quien obtuvo el 49,8 por ciento de los votos en el balotaje.
Orsi asume el desafío de responder a las demandas sociales más urgentes, mientras busca construir consensos en un escenario parlamentario fragmentado.
- Estados Unidos tendrá un presidente condenado por delitos
La carrera por la presidencia en Estados Unidos fue disputada por el republicano Donald Trump y la demócrata Kamala Harris. La nominación de esta última a los comicios del 5 de noviembre se produjo luego de la retirada de la candidatura de Joe Biden, en medio de un contexto de baja popularidad y cuestionamientos sobre su capacidad para asumir un segundo mandato.
En un escenario de alta polarización, el republicano se alzó vencedor con 312 votos electorales sobre los 226 de la demócrata.
De esta forma, Trump se convierte en el primer mandatario en revalidar el cargo en elecciones no consecutivas en más de un siglo y en el primer inquilino de la Casa Blanca condenado por delitos, y con varias causas pendientes.
Sus mayores donantes durante la campaña electoral tienen ya asegurado un puesto en el gabinete, el más exclusivo y costoso en la historia reciente del país. Al menos ocho miembros del futuro equipo de gobierno y sus parejas donaron juntos más de 37 millones dólares, cifra récord que deja atrás incluso los números del primer mandato del republicano.
El magnate regresa con un discurso que utilizó a su favor, una vez más, el descontento hacia la migración o las preocupaciones estructurales económicas. En esa línea, ya confirmó que una de sus primeras medidas económicas tras su investidura el 25 de enero será aumentar los aranceles aduaneros a los productos importados de China, Canadá y México.
Asimismo, anunció que firmará una orden ejecutiva para lanzar la mayor operación de deportación en la historia de Estados Unidos, además de indultar a los condenados por el asalto al Capitolio y eliminar políticas contra el cambio climático.
Prometió venganza contra sus adversarios políticos y un recorte profundo de la burocracia federal, lo que él considera “Estado profundo”, por no apoyar sus ideas.
Respecto al conflicto entre Rusia y Ucrania, el magnate neoyorkino manifestó que “debe haber un alto al fuego inmediato y deben comenzar las negociaciones” y renovó advertencias de que estaba abierto a retirar a Estados Unidos de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
En relación con Medio Oriente, avisó que habrá «un infierno que pagar» en la región si los prisioneros israelíes en la Franja de Gazano son liberados antes de su investidura.
¿Será capaz Trump de cumplir cada una de sus promesas? Los republicanos tienen ahora el control de las dos cámaras del Congreso y cuentan con una Corte Suprema dominada por jueces conservadores, incluidos tres nombrados por Trump.
Esto representa un factor clave para que el 47 presidente de Estados Unidos pueda sacar adelante sus prioridades políticas sin oposición. En su discurso de victoria, el republicano prometió que «gobernaría bajo un simple lema: promesas hechas, promesas cumplidas. Vamos a cumplir nuestras promesas».
América a la vanguardia de la solidaridad con Palestina en 2024
América Latina estuvo a vanguardia de la solidaridad con Palestina durante el 2024. A diferencia de otras regiones del planeta, un grupo de presidentes y gobiernos expresaron posturas contundentes contra “Israel”.
- Países latinoamericanos lideran acciones concretas contra “Israel”
Países como Colombia, Brasil, Cuba, Venezuela, Bolivia, Nicaragua y Chiletuvieron las posiciones más claras y duras en contra del genocidio en la Franja de Gaza.
Sus presidentes alzaron la voz para pedir un alto al fuego urgente, y algunos de ellos tomaron acciones concretas contra “Tel Aviv”.
Este fue el caso de Colombia y Nicaragua que rompieron este año sus relaciones diplomáticas con “Israel”. Bolivia fue el primer país de la región en tomar dicha decisión en 2023, en repudio y condena a la agresiva y desproporcionada ofensiva de la entidad en la Franja de Gaza. Venezuela ya lo había hecho en 2009 y Cuba desde 1973.
Los gobiernos de Brasil, Chile y Honduras también mostraron las crecientes tensiones en el plano diplomático al convocar a consultas a sus embajadores en “Tel Aviv”.
Las desavenencias impactaron además en el sector comercial. Colombia emitió un decreto para prohibir exportación de carbón a la entidad ocupante y suspendió la compra de armamento israelí.
En contraste, Brasil representó el primer país del Mercosur en ratificar la entrada en vigor de un acuerdo de libre comercio con la Autoridad Palestina y Bolivia envío 90 toneladas de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza.
Algunos gobiernos latinoamericanos respaldaron incluso la demanda presentada por Sudáfrica ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) la cual acusa a “Israel” de violar la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio con su guerra en la Franja de Gaza.
Colombia, Bolivia, México, Chile y Cuba presentaron una declaración de intervención en este procedimiento contencioso a través de los artículos 62 y 63 del Estatuto de la Corte.
- Bloques latinoamericanos y caribeños alzaron su voz por Palestina
La Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América – Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) declaró el estatus de Palestina como País Hermano y lo incluyó como invitado permanente a sus reuniones.
En una declaración especial durante una cumbre en Venezuela a propósito del vigésimo aniversario de su fundación, los 10 países del bloque de integración reiteraron su condena a los “terribles crímenes de lesa humanidad que se han cometido en la Franja de Gaza y territorios palestinos ilegalmente ocupados”, y rechazaron “rotundamente el genocidio despiadado e inhumano cometido por “Israel”, la potencia ocupante, así como su plan de expoliación, invasión y dominio”.
Un total de 24 países de los 33 que integran la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) suscribieron durante su VIII Cumbre un comunicado en repudio a las acciones de “Tel Aviv”.
Los signatarios demandaron un alto “al fuego humanitario inmediato” y llamaron a la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas y a todas las partes en conflicto a cumplir con el derecho internacional, especialmente en la protección a los civiles.
Asimismo, Barbados (19 de abril), Jamaica (22 de abril), Trinidad y Tobago (2 de mayo), y Bahamas (7 de mayo) se convirtieron en los más recientes países de la Comunidad del Caribe (CARICOM) en reconocer a Palestina como Estado. Desde noviembre de 2023, el Gobierno de Belice suspendió sus relaciones diplomáticas con «Israel».
- Estados Unidos: ola de protestas estudiantiles exigió fin del apoyo a “Israel”
Mientras que los campus universitarios en Estados Unidos fueron escenarios este año de protestas a favor de la causa Palestina, como parte de un enorme movimiento por el fin del apoyo de Washington a la guerra de “Israel” contra el pueblo de la Franja de Gaza.
La Universidad de Columbia fue la primera donde se formó una importante acampada propalestina. También una de las primeras en ser acusadas de antisemitismo. A pesar de las detenciones masivas y la represión policial, otros centros educativos se sumaron a esta ola de protestas, incluidas prestigiosas universidades como Yale o Harvard.
Con banderas palestinas, cánticos y carteles, los manifestantes pidieron a las instituciones romper relaciones con las empresas e individuos que tuvieran vínculos con la entidad.
Protestas contra el apoyo de Estados Unidos a “Israel” también marcaron las jornadas de la Convención Nacional Demócrata en Chicago. Participaron tanto activistas como votantes desilusionados con la política del presidente Joe Biden en Medio Oriente.
Con consignas de “Fin a la ocupación ahora” y “Todo el mundo los observa” criticaron la gestión ante un conflicto que está latente y que no se le acaba de dar solución.
Desde América Latina hasta en el propio Estados Unidos nunca antes la presión fue tan intensa contra el genocidio de “Israel” como en este 2024, y en términos de solidaridad con Palestina.
América Latina y el Caribe: violencia, economía y migración
América Latina y Caribe atravesó un periodo de fuerte aumento de la inseguridad y la violencia durante el 2024. Sus países registraron en el año un repunte del crimen organizado y los conflictos con graves consecuencias para el desarrollo socioeconómico. La región concentró casi un tercio de los homicidios globales. Una cifra que alarma si se tiene en cuenta que alberga solo el 8 por ciento de la población mundial.
De acuerdo recientes investigaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) y del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el crimen le cuesta a la región más del 3 por ciento de su Producto Interno Bruto. Esto equivale al 80 por ciento de los presupuestos públicos de educación de la región y al doble de los gastos en asistencia social.
Estos costos surgen de la pérdida de productividad causada por vidas perdidas, lesiones y encarcelamientos; del gasto del sector privado en seguridad; y del gasto público en servicios policiales, judiciales y penitenciarios.
La delincuencia «limita el crecimiento, impulsa la desigualdad y desvía la inversión privada y pública. Debemos aunar y redoblar esfuerzos para cambiar esa realidad», dijo el presidente del BID, Ilan Goldfajn, en un comunicado.
Pero el impacto del crimen no termina ahí. Frena la inversión, reduce el turismo y fomenta la emigración, debilitando aún más la resiliencia económica y limitando el crecimiento futuro de la región.
Al respecto, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) ya advirtió que la región enfrenta una “trampa de baja capacidad para crecer”. En un balance preliminar, divulgado a finales de diciembre, pronosticó que las tasas de crecimiento serán de un 2,2 y un 2,4 por ciento, en 2024 y 2025 respectivamente. Estas tasas “no permitirán cerrar las brechas que exhiben las economías de la región con respecto a las economías desarrolladas”, alertó.
Cada vez más personas se desplazan en América Latina debido a que persisten precisamente estas situaciones de violencia, inseguridad y desigualdad. La región continúa con los flujos migratorios irregulares más intensos en todo el planeta.
En particular, el número de niños, niñas y adolescentes no acompañados y separados que migraron durante el 2024 por varios puntos de la región alcanzó cifras récord, según las estimaciones de Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).
Los datos indican que, en la actualidad, uno de cada cuatro migrantes en América Latina y el Caribe es un niño, niña o adolescente. Las crisis prolongadas a las que se enfrenta la región no se limitan al incremento de los flujos migratorios y los desplazamientos internos. La violencia armada y los riesgos relacionados con el clima afectan de forma desproporcionada a las poblaciones más vulnerables, especialmente la infancia.
Desigualdad, pobreza, falta de oportunidades, corrupción, son algunos de los factores que contribuyen a la proliferación de las bandas delincuenciales en América Latina y el Caribe.
A eso se suma el narcotráfico como una de las actividades más lucrativas, y por el cual se acrecentó la violencia como epicentro de los problemas más apremiantes de América Latina y el Caribe en el 2024.
AL MAYADEEN