El mundo está cambiando al vórtice Sur-Sur
Estamos siendo testigos del surgimiento de grandes agregaciones económicas y demográficas en el Sur global que socavan objetivamente el dominio global del Occidente colectivo.
La acción genera reacción. Los pueblos empiezan a resistir. Hemos visto esto en varios países de Medio Oriente, en Irak, Afganistán, Líbano, Siria e Irán. Culmina con el actual aumento de la resistencia palestina en la Franja de Gaza.
Rusia, a su vez, también está reaccionando cada vez más bruscamente a los planes de expansión de la OTAN en el espacio de la antigua URSS. Fenómenos similares se pueden observar en América Latina y otras regiones del mundo.
Hoy, el surgimiento de un mundo multipolar en torno a la OCS y los BRICS representa la esperanza para que la humanidad finalmente ponga fin al proyecto totalitario y unipolar de Occidente.
Este es el primer y muy importante paso.
La historia desafía a los pueblos y Estados del Este y del Sur a resistir los apetitos hegemónicos de Occidente con un nuevo modelo más igualitario y cooperativo e incluir en él, en la medida de lo posible, a los propios pueblos occidentales.
La rivalidad sólo debería dirigirse contra la elite gobernante occidental, y no contra la gente común, escribe Dimitris Konstantakopoulos, ex asesor del primer ministro griego Andreas Papandreou y ex miembro del secretariado del partido SYRIZA.
