Ponencia de Demóstenes Martínez en la puesta en circulación del libro Marrón Tierra y Negra Noche
El abogado y periodista Demóstenes Martínez, realizó una ponencia especial el pasado 26 de noviembre en la puesta en circulación del libro «Marrón Tierra y Negra Noche». Obra de la autoría del Dr. Franklin Almeyda Rancier.
Buenas Noches:
La creatividad e imaginación del autor para escribir esta extraordinaria obra se pone de manifiesto de inmediato, explicando el mecanismo a utilizar para hacer llegar el mensaje y plasmando los aportes que contribuyen a forjar una conciencia social mejor definida para comprender con facilidad nuestros orígenes. Se trata de una HISTORIA NOVELADA, donde la ficción se convierte en una especie de venas por donde circula la sangre que da origen al nacimiento de dos pueblos, que aunque comparten el mismo cuerpo, dos corazones diferentes le dan vida.
Utilizando un lenguaje llano, coloquial y directo, la narrativa va intercalando entre la ficción y la realidad, sin cargar excesivamente hacía un lado, siempre rompiendo el hielo, y dejando a los lectores ávidos de enterarse de los hechos colaterales que nutre lo imaginario o de los hechos históricos reales que han configurado al dominicano de hoy. La estructura del pensamiento sistemático para analizar los hechos y su forma de presentación denotan la influencia que ha tenido en el autor el profesor Juan Bosch.
En una primera fase de ambientación se puede apreciar los conocimientos que el Dr. Almeyda tiene sobre las ciencias médicas y las tecnologías. Observé a un autor, con su edad, actualizado con el pensamiento de los millennials y centennials. Todo lo anterior eran preparativos para comprender mejor el diseño de este legado imperecedero y útil que nos entrega este reputado académico mediante una HISTORIA NOVELADA sobre los orígenes de estos pueblos caribeños, que ha sido incubada en su prodigiosa mente por cerca de 50 años e iniciada su redacción hace 4 años.
Así descubro que jóvenes científicos del presente, muy competentes, son utilizados en la ficción de la obra para, abrazados de las leyes de Gregor Mendel, padre de la genética, manipular el genoma humano y mediante una inseminación artificial disuelven en la cadena genética durante la fecundación, conocimientos imborrables desde la edad de piedra hasta nuestros días, que pueden ser transferidos de generación a generación. Los científicos contemplaron realizar algo parecido al curioso caso de Benjamin Button, obra literaria de Fitzgerald de 1922, que décadas después fue llevada al cine y protagonizada por Brad Pitt, donde en un proceso de inversión de la vida, una persona nace vieja y muere siendo un bebe.
Así concibieron en Arimatla al HUGONOTE con un back-up que se actualizaba constantemente para incorporar más conocimientos. Este personaje aparenta vivir en todos los tiempos y en todos los lugares, que a pesar de no saber leer, aprende y retiene todo lo que ocurre y tiene la gracia de contarlo a otras generaciones, que al igual que el lector, no quisiera que este hombre cierre su boca nunca.
El lector tiene la suerte de contar con la imaginación fecunda del autor para colocar en su libro, no solo a un “sabelotodo” y sus descendientes, sino, además, introduce en la ficción a personas inquietas que demandan de Francois Dominique de la Mancha, que siga revelando sus vivencias y las aventuras de otros amigos y conocidos. Diríamos que el HUGONOTE, como se le apodaba a Francois, era casi una especie de testigo presencial de todo cuanto ocurrió en el pasado. Era la aproximación más cercana a la verdad.
Años atrás, en ausencia de tecnologías, las personas siempre quisieron satisfacer sus necesidades de estar comunicados e informados. Y se reunían en lugares para escuchar relatos, especialmente de las grandes epopeyas, conquistas, batallas y justicia. Tom Hanks, el actor, personifica en una de sus películas a un contador de historias que se movía por varias ciudades del viejo Oeste, después de la guerra civil, y la gente lo esperaba con ansias para escuchar las Noticias del Mundo, ya que lo hacía con gracia y con encanto.
Ser un contador de historia es un arte, es un Don, que hoy desvela al Dr. Almeyda, un académico de una dilatada experiencia como profesor de historia.
El lector se ve provocado y desafiado por el Dr. Almeyda, en una suerte de acertijos, a descubrir sus motivaciones para sugerir un título que de inmediato obliga a cuestionarnos sobre quien es Marrón Tierra? si la tierra puede ser rojiza, gris, negra, por que se decide por el marrón? a que se refiere con Negra Noche? de por si las noches son oscuras, aveces tenemos días negros, hay noches blancas (San Petersburgo) Noche Buena, y una vez al año, precisamente hoy, hay un viernes negro.
Hablar de forma didáctica de los orígenes de dos pueblos tan cultural y étnicamente diferenciados a través de Francois Dominique de la Mancha, EL HUGONOTE, y entretenernos al mismo tiempo utilizando recursos literarios no para combinar realidad y ficción, sino para usar personajes y lugares imaginarios que nos permita un acercamiento a nuestra historia, la verdad es que ha sido una genialidad. Este personaje principal puede darse el lujo de hacer juicios y propuestas sobre hechos y acontecimientos que en un libro convencional de historia le está prácticamente vedado a sus autores.
El Dr. Franklin Almeyda despliega en MARRÓN TIERRA Y NEGRA NOCHE todo su talento narrativo, donde lo real no choca con lo imaginado, pues los campos están debidamente bien diferenciados. Esta HISTORIA NOVELADA es vista por el Dr. Almeyda como un recurso literario en su acepción didáctica y pedagógica para que se pueda comprender mejor los procesos históricos, que es su objetivo principal. Presenta informaciones y datos históricos impresionantes que son sacados del anonimato, o corrige distorsiones ancestrales para que el país esté debidamente ilustrado sobre nuestro pasado.
En este extraordinario aporte intelectual que se pone oficialmente en circulación hoy en Santiago, el Dr. Almeyda no oculta sus convicciones democráticas, de respeto institucional, patriótica, su visión de Estado-Nación, su fe en el porvenir, sus ideas progresistas, su arraigo con la justicia social, su compromiso con una historia, no solo bien contada, sino, además, apegada a la realidad, aunque este dicho a través de Francois Dominique de la Mancha, El HUGONOTE.
MARRÓN TIERRA Y NEGRA NOCHE está contextualizada desde la época de la colonización hasta la reafirmación definitiva de nuestra independencia y nuestra dominicanidad con la culminación exitosa de la Guerra de Restauración. Aunque al hablar de que la Negra Noche es un Estado fallido y Marrón Tierra es un Estado en auge, el autor ubica y proyecta su relato a los momentos actuales. Luego de las batallas contra los haitianos por la Independencia, es la gesta contra la Anexión a España el momento cumbre que rompe con la ambigüedad sobre la definición de la autenticidad dominicana y comprender definitivamente que ya no éramos españoles.
A partir de ese momento se configura el verdadero Estado -Nación del pueblo dominicano, caracterizado, según lo explica el Dr. Almeyda en esta magnífica obra, cuando un conglomerado humano definido por un territorio logra su arraigo, cohesión social, identidad, tradición, y por supuesto darse una constitución política.
Por el HUGONOTE y su entorno sabemos que las confrontaciones por control territorial y mercantil en que estaba sumergida España con otras naciones europeas, como Inglaterra, Francia y Holanda, es clave para entender por qué en la colonizada Isla de Santo Domingo surgen un MARRÓN TIERRA Y una NEGRA NOCHE.
Cito: “las condiciones productivas de España se situaban muy detrás de las restantes metrópolis europeas…En España apenas asomaban algunos indicios de capitalismo mercantil….” “los monarcas españoles no entendían que la colonización y conquista era una base necesaria para la acumulación originaria de capital”. Por supuesto, comprendiendo esta acumulación primitiva del capital, en la dimensión dada por Carlos Marx, como un proceso precedente al sistema capitalista responsable de la separación de los medios de producción y los productores directos, contrario, agrego yo, a como pensaba Adam Smith un siglo antes de Marx, cuando en su obra la Riqueza de las Naciones asegura que la acumulacion de capital era la garantía para el bienestar de los pueblos.
“Las cosas podían haber sucedido de cualquier otra manera y, sin embargo, sucedieron así”. He tomado este fragmento inicial de la novela El Camino de Miguel Delibes quien usa ese fantástico relato para significar que de un conjunto de hechos derivan en una serie de consecuencias.
El autor, sin perder el hilo y con una coherencia sorprendente, utiliza los escenarios más variados (tabernas, universidades, lecho familiar, iglesias) y los personajes secundarios más oportunos (parientes, amigos, académicos) para que todos, juntos al HUGONOTE hagan sus aportes sobre el origen de la nación dominicana (Marrón Tierra) y el nacimiento de Haití como país (Negra Noche). Estos términos, que titulan el libro, no son el resultado del capricho del autor. No. Vienen determinados por las etnias que lo conformaron.
Aclara que los haitianos “…tienen en su cultura y etnia características africanas más dominante que el dominicano, que es más española que africana. por eso los haitianos son negros como la noche negra y los dominicanos morenos como la tierra. Haití retuvo una etnia definida y el dominicano es el fruto de ambas etnias. En el dominicano hay una cultura españolizante y en el haitiano predomina la africana”. El autor no deja espacio a dudas, en los diálogos de sus ficticios personajes, para diferenciar la etnia como factor que determina la genética de los aspectos culturales. Queda tan claro, que al leer este libro nadie se confundirá nunca más.
Por eso pone en boca de uno de los personajes ficticios, de Yael, nieto del HUGONOTE, pero quien en la vida real es nieto del Dr. Almeyda, lo siguiente: “En América estas dos naciones se originaron siendo colonias española y francesa, respectivamente; fue desde donde empezó todo. Ahora son dos repúblicas con desarrollo contrapuestos. Una negra como la noche y la otra marrón como la tierra. Ambas se culpan sin ser totalmente responsables, una y otra, de lo ocurrido en su historia”
El Dr. Almeyda tiene la habilidad de sentar a los lectores en el Paraninfo de la Universidad de Salamanca, primada de España, para que cada uno de nosotros también seamos testigo de un rico debate entre académicos de diferentes partes del mundo, que abordan el Contexto Histórico de Europa en el Proceso de Colonización en América. Como una advertencia y para cuidar que estos historiadores no se apartaran de la realidad de los hechos y los arrope la parcialidad de su nacionalismo, el autor tuvo el tacto de sentar entre el público, en primera fila, al HUGONOTE, que había sido corsario y esclavo temporal y, reitero, quien todo lo sabía como si lo hubiese vivido.
Que cautivante fue escuchar hablar durante el debate sobre los acontecimientos y personajes del viejo mundo que determinaron el nacimiento de dos naciones en una misma Isla del Caribe: Revolucion Francesa, Revolucion Industrial, Declaracion de los Derechos del Hombre, capitalismo mercantil europeo, Antiguo y Nuevo Regimen, el tratado de Ryswick (Espana y Francia), el Tratado de Paris (Inglaterra y las 13 Colonias- USA), libertdad, esclavitud, Santo Dimingo frances y espanol, Acumulacion originaria de capital, Reforma Protestante, el Renacimiento, Edad Media, Iglesia Catolica. Hablar, entre otros sobre el Emperador Napoleon Bonaparte, el Rey Luis XVI, el jacobino Maximilien Robespierre, el girondino Jacques Pierre Brissot, Beethoven, Tousaint Loverture, Lutero, Calvino, Carlos Marx, y por supuesto sobre el HUGONOTE que era un calvinista, que estuvo presente en todo, aunque nadie lo viera o lo recuerde.
Lo referido tiene su valor cuando el propio HUGONOTE señala que “la historia es el proceso de hechos sucedidos; desentrañar sus causas permite comprender sus significados; entender el pasado nos lleva a explicar el presente y que no nos sorprenda el futuro”.
Los convites familiares, donde se reunían todos los descendientes y colaterales del HUGONOTE, era su escenario favorito para hablar de todos los acontecimientos que fueron marcando el origen de ambas naciones. Ahí se explican las motivaciones para la Independencia en el primer cuarto del siglo XIX de casi todos los países de América Latina; la influencia en el ideario de libertdad que represento para el Continente la independencia haitiana y la obolicion de la esclavitud; la Reconquista; la España Boba; la ocupación o Era haitiana de 1822-1844, los preparativos y gesta de Independencia Nacional; las batallas que simbolizaron el heroismo y patriotismo de la incipiente nación dominicana; las confrontaciones y traiciones intestinas contra la nación; una mirada retrospectiva al determinate papel de Juan Pablo Duarte y los trinitarios, así como la Anexión a España y la Guerra Restauradora.
Aprovecha el autor a sus personajes para hacer propuestas de justicia histórica, como establecer un Monumento al Originario Americano en el Santo Cerro, donde ocurrió una matanza de aborígenes o transformar el Faro a Colon en un Monumento Memorial contra la Esclavitud. También sugiere reevaluar el papel heroico o valiente que le asigna la historia a Pedro Santana durante el proceso de Independencia o a Juan Sanchez Ramirez durante la llamada Reconquista de principios del siglo XIX. Además se contextualiza la expresión de que la Isla es una e indivisible acuñada por Toussaint.
Aunque aparente un paralelismo lo explicado por el autor en Marrón Tierra y Negra Noche, refiriéndose a República Dominicana y Haití, he seleccionado la parte inicial de la inmortal novela de Charles Dickens, Historia de Dos Ciudades, en alusión a las virtudes y diferencias entre París (revolución francesa) y Londres (revolución Industrial) :
“Era el mejor de los tiempos, era el peor de los tiempos, la edad de la sabiduría, y también de la locura; la época de las creencias y de la incredulidad; la era de la luz y de las tinieblas; la primavera de la esperanza y el invierno de la desesperación. Todo lo poseíamos, pero no teníamos nada…”
Señoras y señores, lean a MARRÓN TIERRA Y NEGRA NOCHE y quedarán gratamente atrapados y amarrados a ella como yo.
Muchas Gracias