Comienza a circular en Alemania primer tren impulsado con hidrógeno
DL. La primera línea del mundo en la que circulan trenes impulsados con hidrógeno comenzó a operar este miércoles en la localidad alemana de Bremervörde (norte) con vehículos fabricados por la multinacional Alstom y con participación de otras empresas germanas.
Las autoridades de esa localidad del «Land» de Baja Sajonia informaron de que el coste total del proyecto que incluye los trenes que circularán en la ruta entre Cuxhaven, Bremerhaven, Bremervörde y Buxtehude es de 93 millones de euros.
Los catorce trenes encargados sustituirán progresivamente a los 15 impulsados por motores diésel que han sido utilizados en esa línea hasta ahora. Los nuevos modelos, Coradia iLint, tienen una autonomía de mil kilómetros y están libres de emisiones contaminantes, según explicó Alstom en un comunicado.
La puesta en circulación de los nuevos trenes permitirá evitar consumir 1,6 millones de litros de diésel al año, lo que significa que ya no se generarán 4,400 toneladas de CO2. Cinco de los nuevos trenes están actualmente en marcha, y los demás se agregarán a finales de año.
Ya en septiembre de 2018 se comenzó a operar los trenes en pruebas sin que se registran problemas, agregó la multinacional francesa.
Los trenes se recargarán en una estación construida con ese propósito que tiene sesenta y cuatro tanques de almacenamiento de alta presión de 500 bares con una capacidad total de 1,800 kilogramos, seis compresores de hidrógeno y dos bombas de combustible.
Con el uso de hidrógeno como combustible para los trenes, el medio ambiente se ve notablemente aliviado, ya que un kilogramo de hidrógenoreemplaza alrededor de 4,5 litros de combustible diésel, según el comunicado de Alstom, que indicó que está prevista la producción posterior de hidrógeno in situ mediante electrólisis y electricidad renovable.
El modelo Coradia iLint es el primer tren de pasajeros del mundo que funciona con una celda de combustible de hidrógeno que genera energía eléctrica para la propulsión, es silencioso y solo emite vapor de agua y condensación.
En la red en la que comenzó a operar hoy el tren viaja a velocidades de 80 a 120 kilómetros por hora, con una velocidad máxima de 140 kilómetros por hora. Fue diseñado en la planta de Alstom en la localidad alemana de Salzgitter y en la francesa de Tarbes.
El proyecto está financiado por el Ministerio Federal de Asuntos Digitales y Transporte como parte del Programa Nacional de Innovación para Tecnología de Hidrógeno y Pilas de Combustible. El gobierno federal aporta 8,4 millones de euros a los costes de los vehículos y 4,3 millones de euros a los costes de la estación de servicio.