Los negocios insertados en la Seguridad Social recurren a la credibilidad de estos humoristas, quienes pretenden describir las bondades de las AFP. Pero en realidad el mensaje es recibido por la población como una burla, como un chiste de mal gusto, en el que los afiliados se sienten re victimizados.
Lo que las AFP ofrecen a sus afiliados no es un asunto para reírse, más bien es algo que motiva a llorar, por la desesperanza que proyecta la triste realidad en la que sólo las AFP siguen ganando, mientras las personas afiliadas continúan solo recordando con tristeza las bondades ofrecidas cuando se aprobó la Ley 87-01, pero viendo con indignación el vulgar engaño que se le hizo al pueblo dominicano, con la complicidad de las autoridades.
Este engaño, que contando con la complicidad de legisladores, funcionarios y de los supuestos representantes laborales, auspició la persecución y asedio de los planes de pensiones existentes, hasta lograr su disolución, exigiéndoles igualar las ofertas de las AFP. Sin embargo, hoy vemos que esas mismas ofertas de lo que ofrecerían las AFP, estas han anunciado con toda desfachatez, que no pueden cumplirlas. Y lo peor es que ninguna autoridad dice nada, ninguna le reclama nada, lo poco que dicen y hacen es tomar resoluciones y legislaciones que amplían los márgenes de ganancias de estos negocios en la Seguridad Social, en perjuicio de las prestaciones a las que tienen derecho las personas afiliadas, pero que tristemente no reciben y, al parecer, no las recibirán nunca.
Como ya dije, las autoridades han hecho muy poco para exigirles a las AFP que cumplan con lo ofrecido. Mientras tanto, miles de empleados perdieron las coberturas de los planes a los que pertenecían, mientras la AFP a la que fueron afiliados les ofrece migajas de prestaciones que no satisfacen las necesidades, ni se corresponden con lo ofrecido.
La verdad es que hacer humor a partir del dolor del pueblo no es nada gracioso. Qué bueno que el pueblo, al ver este anuncio publicitario, se indigna y lo percibe como una burla más de los negocios que se enriquecen con el engaño perpetuado en la Seguridad Social. Ya en las redes sociales circulan memes que expresan esta indignación.
Las figuras públicas deben cuidar su imagen y evitar asociarse a acciones dañinas a la población. Mi madre siempre nos decía “Hay dinero que es mejor no ganarse”. Creo que este es un caso de esos a los que ella se refería.
¿Cómo puedo admirar a alguien que es capaz de afirmar mentiras como si fueran verdades, engañando a la sociedad que les sigue y los admira?
¿Vale la pena comprometer su imagen y exponerse al descrédito público, por ganarse un pago salpicado de daños a tantos afiliados a quienes se les han negado sus derechos y que han sido atropellados cuando más necesitaban del apoyo que la Seguridad Social les ha debido ofrecer, cuando han estado enfermos o cuando deberían poder pensionarse?
El Movimiento por las Pensiones de los Servidores Públicos (MOPESEP)continúa impulsando el logro de los reclamos que han hecho:
1.- Que las personas pensionadas continúen teniendo el Seguro Familiar de Salud del Régimen Contributivo.
2.- Que se reconozca el derecho a permanecer en el sistema de reparto, a los servidores públicos de cualquier edad, amparados por la ley 379-81.
3.- Que se generalice a todas las instituciones públicas la no aplicación del límite en las pensiones, instituido por la Ley 379-81.
La Coalición por la Seguridad Social Digna ha presentado una propuesta de modificación integral de la Ley 87-01, basada en garantizar los derechos fundamentales a la Salud Integral y a la Seguridad Social que consigna nuestra Constitución. El MOPESEPapoya y suscribe esta propuesta que contribuye a lograr que nuestro Sistema Dominicano de Seguridad Social verdaderamente se convierta en un instrumento de mejora de la calidad de vida de la población dominicana, con un enfoque de derechos y no de negocios que se nutran de forma parasitaria del financiamiento de la Seguridad Social.
La Seguridad Social no es asunto de juego, ni de chistes crueles, ni mentiras. Por el contrario, la Seguridad Social es un asunto de derechos fundamentales que están siendo negados, mientras los negocios de las ARS y las AFP continúan aumentando sus ganancias, sobre los derechos conculcados de las personas afiliadas, que para colmo deben ver a humoristas y profesionales decir mentiras para distraerlos y desviar su atención, como si con eso lograran mejorar sus condiciones de vida.
Los servidores públicos esperan que más pronto que tarde, el gobierno y las autoridades de la Seguridad Social restituyan los derechos que les siguen negando en las pensiones a las que tienen derecho.
La población dominicana, afiliados o no a la Seguridad Social, ha tomado consciencia de los problemas del actual sistema pensiones, que basado en la capitalización individual, no ha podido cumplir con las promesas con las que lograron la aceptación de este modelo, creando expectativas que no han podido cumplir