Notas para el estudio de la guerra cognitiva. Parte 1

 

Por José Garcés
Psicólogo

En el año 2020 se publica el estudio “Cognitive Warfare” (1), firmado por François du Cluzel, como parte del proyecto “Innovation Hub”, también conocido como “Innovation for Defence Excellence and Security (IDEaS)” con sede en Canadá. En este estudio no se identifica la responsabilidad directa de la OTAN, sin embargo, no es difícil encontrarla luego de leer algunas líneas, ya que el autor nombra insistentemente a la NATO, y de cómo se beneficiaría este organismo de las ventajas de la Guerra Cognitiva.
El artículo en cuestión es informativo y lleno de generalidades, y el concepto clave de lo que repite una y otra vez a través de sus 45 páginas no lo define en forma explícita. Es decir, no hay una definición operacional concreta de lo que es “Guerra Cognitiva” (CW por sus siglas en inglés), aunque va apuntando variables para su comprensión. Desde estas líneas suponemos que la ventaja militar que supone el uso de la Guerra Cognitiva no debe ser fácilmente publicitado, sobre todo por parte de la OTAN. Así que no nos esperamos a que la OTAN ofrezca las armas para vencerse a sí misma.
François du Cluzel es veterano escritor e investigador en temas de seguridad de la OTAN. Su perfil de Linkedin así lo demuestra, en él se publican interesantes artículos como: “NATO Innovation Challenge is back”, “The End of Monopoly?” o “Polycentrism, a driving force in the future?”. En dicho perfil se define a sí mismo como “Innovation Project Manager at NATO ACT Innovation Hub”
Como vemos, el autor no es un advenedizo en cuestiones militares y se pasea por modalidades de guerra que ya han hecho anticuadas las OPSIC, como la Guerra de Información (IW, por sus siglas en inglés). Es por ello que iniciamos esta serie de ensayos con el objeto de definir en qué consiste la Guerra Cognitiva y cómo podemos defendernos de esta nueva tecnología bélica.
En el prefacio del estudio citado se puede leer lo siguiente:
“La mente humana se ha convertido en una nueva esfera de la guerra. Debido al creciente papel que hoy desempeña la tecnología y la enorme cantidad de información producida, podemos decir que las capacidades cognitivas individuales ya no son suficientes para garantizar una toma de decisiones lo suficientemente informada y oportuna. Ha sido este problema el que ha llevado a la creación del concepto de Guerra Cognitiva, el cual se hace cada vez más recurrente en la terminología militar de los últimos años. La Guerra Cognitiva ha resultado ser un gran desafío, especialmente porque altera la comprensión y la reacción, de forma gradual y sutil, ante ciertos acontecimientos”.
Se ha señalado que uno de los elementos claves para entender lo que es la Guerra cognitiva, es que anteriormente los individuos estaban sometidos pasivamente a la manipulación y a la propaganda, ahora contribuyen activamente a su promoción.
Otro aspecto interesante de la guerra cognitiva que se señala en este informe es lo relativo a la ciberpsicología, que sería la unión entre la psicología y la cibernética. Ya para nadie es un secreto que los novedosos mecanismos de control mental a través de la Big Data, del “Internet de todas las cosas” y del dominio del ciber-espacio, han abierto la puerta para el dominio de la psique humana. La creciente adicción a los dispositivos conectados a internet, como celulares, tablets y computadoras, es muestra de ello.
DIFERENCIAS ENTRE OPSIC Y GUERRA COGNITIVA
Nos aventuraremos a hacer una primera diferenciación entre Opsic y Guerra Cognitiva, aun sin haber definido en concreto qué es esta última. Queda claro que la definición operacional de lo que es Guerra cognitiva constituye un elemento estratégico para la defensa de la nación. En estos momentos podemos suponer que se están utilizando los elementos de la Guerra Cognitiva en el Conflicto de Ucrania con Rusia. Deducimos esto ya que este estudio se publicó en 2020 y de alguna manera es patrocinado por la OTAN, por otra parte son claras las intenciones de Ucrania de ingresar a ese organismo, de lo que se desprende que la OTAN puede estar apoyando a Ucrania en la tecnología de la Guerra Cognitiva, pero como hemos señalado, son solo inferencias y deducciones. De lo que hasta el momento hemos visto en el conflicto militar Ucrania-Rusia podemos deducir algunas metodologías y paralelamente usar un método inductivo para construir el concepto de Guerra Cognitiva. Esto sería más o menos como una persecución en caliente, solo que lo que estamos persiguiendo en este caso son conceptos, ideas y principios.
De manera tal que por el momento podemos aventurarnos a adelantar algunos elementos:
1. Las OPSIC implican el uso de un escenario definido y delimitado. Por ejemplo: La acciones que se emprendieron contra la Revolución bolivariana se hicieron en Venezuela. Para este fin no hacía falta involucrar, por ejemplo, a la población de Polonia. Sin embargo, en la Guerra Cognitiva, la manipulación se hace con todo el planeta, en virtud del alcance ilimitado de las telecomunicaciones y del imperialismo, el conflicto se realiza a escala planetaria.
De lo anterior se desprende el

1º Postulado:
La Guerra Cognitiva se hace a escala planetaria.
Ya no importa si se convierte en un conflicto de alta intensidad, o si es la preparación para el mismo. El capitalismo del mar del norte ha entendido que la Tercera Guerra Mundial ya comenzó y es una guerra por su supervivencia.
En la Guerra Cognitiva no importa tanto definir Audiencia Blanco, ya que la manipulación se hace para TODOS los habitantes del planeta.

2. En la Guerra Cognitiva el objetivo no es neutralizar al enemigo sino su aniquilación absoluta y definitiva. Vemos como la “rusofobia” desatada en los medios occidentales rebasan cualquier dimensión de la conocida por la raza humana. El llamado a matar “tantos rusos como sea posible” y a “matar niños rusos”, ya se había hecho antes, lo que no se había hecho antes es llamar a matar rusos a escala planetaria.
De lo anterior se desprende el

2º Postulado
En la Guerra Cognitiva se pretende la destrucción completa y definitiva del enemigo a escala planetaria. El capitalismo del mar del norte ha entendido que ya su crisis estructural no tiene vuelta atrás, y su lucha en este momento es de vida o muerte. Ya el imperialismo no puede tolerar la posibilidad de que exista un bastión que esté en contra de sus intereses. Es decir, ya no puede tolerarse la existencia de una Korea del Norte, o lo que en su momento fue un Vietnam del Norte, o una Alemania del Este, ni tampoco admite la posibilidad de un mundo multipolar. En ese sentido el Presidente Biden es claro: «Va a haber un nuevo orden mundial y tenemos que liderarlo» (2). Por eso se apresta a predisponer a toda la población mundial en contra de sus enemigos.
La preocupación del imperialismo es lograr “Éxitos políticos duraderos”, y ese es uno de los objetivos fundamentales de la Guerra Cognitiva, y es una de las ideas que Du Cluzel repite con insistencia.

3. En las OPSIC se asume el funcionamiento de la psique de la población como susceptible de manipulación para que genere un producto que favorezca a quien dirige la ofensiva militar. Es decir, se mantiene la psique en su funcionamiento “normal”, pero manipulando la entrada (input) de información para obtener una reacción (Output) de acuerdo a los intereses de quien dirige las OPSIC. Es el típico caso de la manipulación a través de los medios de comunicación, como lo ocurrido aquí en Venezuela desde 1999 y con mayor intensidad los días del Golpe de Estado en abril del 2002.
En la guerra cognitiva por el contrario, se trata de manipular a la misma psique para modificar su comportamiento. Se trata de hacer que se comporte de una manera distinta a la que habitualmente lo hace. Recordemos lo ya señalado en el prefacio del trabajo de Du Cluzel que abre esta discusión:
“La Guerra Cognitiva altera la comprensión y la reacción, de forma gradual y sutil, ante ciertos acontecimientos”.
Es decir, de lo que se trata es cambiar el funcionamiento de la maquina mental. Ya no solo es manipular el Input para obtener un Output, ahora es manipular el mismísimo Software.
Esto nos lleva a formular un

3º Postulado
En la Guerra Cognitiva se manipula la psique cambiando el funcionamiento de la misma.
Ya los aportes del filósofo alemán de origen coreano Byun-Chul Han, nos hablan de cómo los nuevos medios de dominación implican atiborrar de información a las personas para generar un tipo especial de percepción que él llama “Percepción Serial” Vs. la “Percepción Simbólica” que es la que se obtiene en virtud de la duración. Con la Percepción Serial vemos la vida como si fuera un juego de video, y los acontecimientos se suceden uno tras otro y nunca paran. Nunca se detiene la gigantesca y aplastante cantidad de información que recibimos, por eso los días nos parecen más cortos y por eso necesitamos dosis exactas de adrenalina que consumimos en las series de Netflix que se han masificado, en las que cada noche nos dan una dosis de adrenalina, y así vamos viviendo la vida como si fuera un juego de video.
En realidad lo que se ha perpetrado contra la humanidad en los últimos tiempos es la modificación del funcionamiento de la psique humana y la han transformado a través dela percepción, misma que han cambiado de simbólica a serial. Por eso, no debe sorprendernos que en la Guerra Cognitiva se profundicen estos elementos, en los que el Imperialismo ya tiene vasta experiencia, y se alcancen niveles nunca antes vistos para hacer que nuestra mente sea una mente serial que vive la vida como si fuera un juego de video, en los que los eventos se producen uno tras otro sin parar. Así vemos con igual valencia afectiva ir a trabajar, comer o tener sexo. Todo es igual, porque en realidad no le prestamos atención a ninguna de las cosas que hacemos porque hacemos tres o cuatro cosas al mismo tiempo.
Du Cluzel afirma que “La Guerra Cognitiva degrada la capacidad de saber y producir el conocimiento”, he ahí el sustrato devastador de este tipo de guerra.
4. En la Guerra Cognitiva se persigue la estructuración de un pensamiento que sirva como una red planetaria, que sirva como “atrapa-moscas” para todas las mentes del mundo.
¿Es posible que un pensamiento sea el líder de todos los pensamientos en el mundo entero?
¿Es posible que un pensamiento sirva como modelo para todos los pensamientos del mundo?
¿Es posible que un pensamiento moldee a todos los demás pensamientos de todas las personas del mundo?
Desde estas líneas creemos que sí, y justamente eso es lo que se logra en la Guerra Cognitiva. Los estudios del biólogo inglés Rupert Sheldrake acerca de los campos morfogenéticos van es esa dirección. Los campos morfogenéticos moldean pensamientos y emociones (Morfo = Forma y Genético, de Génesis, que produce). Así, un campo morfogenético moldea los demás pensamientos a su imagen y semejanza. Podemos recordar que el nazismo alemán uso la consigna: “Ein Volk, ein Reich, ein Führer” (Un pueblo, un Imperio, un Líder). Esta frase encierra en sí misma la idea última del Campo Morfogenético: Un colectivo (el pueblo) que origina una forma de pensamiento (el Imperio) que se plasma y se canaliza a través de un Líder (Adolf Hitler).
Es decir, para formar un campo morfogenético se deben usar los tres elementos que se refieren a:
a) El Líder
b) El colectivo
c) El proceso
En estos momentos, bien podría ser:
a) Ucrania y
b) Todo el planeta (objeto de la CW)
c) En guerra contra Rusia

Esto se deriva de los tres elementos que constituyen cualquier proceso: Pensamiento, emoción y acción.

Esto nos lleva a formular el

4º Postulado.
En la Guerra Cognitiva se logra que haya un pensamiento planetario que modela y moldea a todos los demás pensamientos de todas las personas del mundo.
Esto hace que cada persona en el mundo se convierta en un reproductor de la idea dominante en virtud del campo Morfogenético, y su conducta entonces irá en la misma dirección de la idea que genera y moldea ideas alrededor del planeta. Es decir, en virtud de la Guerra Cognitiva que en estos momentos se adelanta contra Rusia podemos encontrar gente que odie y mate rusos en las Filipinas, en Sri Lanka y en Manaos.
Citando textual a Du Cluzel: “La guerra cognitiva persigue el objetivo de socavar la confianza (confianza pública en los procesos electorales, confianza en instituciones, aliados, políticos…), por lo tanto el propio individuo se convierte en el arma´. El objetivo no es atacar lo que los individuos piensan sino la forma en que piensan”
En el estudio citado se puede leer “El cambio más sorprendente de esta práctica es la omnipresencia de las actividades de CW en la vida cotidiana que se encuentran fuera del área de conflicto”. Así, también Du Cluzel afirma: “Además, la guerra cognitiva es potencialmente interminable ya que no puede haber paz, tratado o rendición para este tipo de conflicto”. Se ha señalado que los objetivos de CW es la estructuración sólida y definitiva de un dominio político duradero a muy largo plazo, podríamos decir que sempiterno.

COROLARIO
Este es un primer papel de trabajo que trata de dar cuenta de lo que es la Guerra Cognitiva. Se trata de usar un método deductivo para analizar lo que está pasando en este momento y al mismo tiempo usar un método inductivo para construir el concepto de Guerra Cognitiva e identificar sus métodos para poder anularlos. En realidad se trata de un método muy aventurado, podemos equivocarnos, pero no vamos a esperar que la OTAN publique su metodología para someter países y continentes enteros en la revista Nature o en National Geografic. Esto, ni lo van a hacer, ni el tiempo está de nuestra parte.
No pretendemos acabar con los postulados, principios y leyes de la Guerra Cognitiva en un solo artículo. De hecho sabemos que deben existir muchos más. Por ejemplo, el papel de la información, de la naturaleza de la información y de la promoción y difusión de esa información es de vital importancia para la Guerra Cognitiva en este momento histórico. De igual forma, hoy día ya las RRSS que ya han estructurado un modo especial de Percepción (la Percepción Serial) y por tanto han modificado la mente para hacer que veamos solo lo que a ellos les interesa y nos comportemos solo como a ellos les interesa. El cómo actúan las RRSS en nuestra psique debe ser un área de investigación de primera línea para entender la Guerra Cognitiva.
La lectura del trabajo de Du Cluzel deja entrever que detrás del concepto de WC que esconde en generalidades, hay una toda tecnología de la psicología cognitiva que toman conceptos como el “Sesgo cognitivo” o la “Disonancia cognitiva”, muy ben organizados y prestos a usarse en un conflicto bélico, y por lo tanto ya previamente definidos operacionalmente, pero no explicitados en el trabajo.
Como vemos hay mucho que investigar y debe abrirse con urgencia una línea de investigación al respecto. Esto es, debe estructurarse de inmediato un equipo interdisciplinario que se encargue de definir, analizar y anular la amenaza que desde el imperio se cierne sobre nosotros en virtud de la Guerra cognitiva. Hoy está siendo usada contra Rusia ¿Cuánto tiempo creen que falta para que la usen contra nosotros?

PROSPECTIVA
El mismo Du Cluzel afirma que uno de los objetivos de la CW es generar desconfianza, y para evitar eso, el atacado debe tener una fortaleza espiritual que lo hace inexpugnable, se trata de “Conocerse a sí mismo”. Cuando el país en cuestión es fuerte espiritual y moralmente, es más difícil el éxito de la CW. En este sentido hay todo un campo de trabajo a nivel político, cultural, ideológico y espiritual en el pueblo venezolano para generar esa fortaleza con la cual, eventualmente poder defendernos de un ataque de CW.
Estaba escrito en el frontispicio del templo de Apolo en la isla de Delfos:
“Conócete a ti mismo y conocerás a los Dioses”.

(1) https://www.innovationhubact.org/sites/default/files/2021- 01/20210122_CW%20Final.pdf
(2) https://actualidad.rt.com/actualidad/424721-biden-nuevo-orden-mundial-liderar

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