Ciencias Económicas vs Intereses políticos, Magín vs Abinader
Por Edmundo Ledesma
Hasta el mes de julio del 2025 que compone los primeros 6 meses del 2025 la economía dominicana registra un crecimiento de apenas 2.4% del Producto Interno Bruto, un desempeño que oscila entre lento y moderado.
Una cantidad importante de economistas dominicanos afirman que la baja inversión de capital es la causa principal de la caída del PIB, en cambio las autoridades han atribuido el bajo crecimiento a factores externos, entre ellos la desaceleración de la economía Norteamericana, sin embargo, como diría el economista Haivanjoe NG Cortiñas, el dato mata el relato.
El economista Luis Manuel Piantini M, en su artículo denominado “Cuentos chinos económicos”, explica que “El primer cuento chino económico es la excusa que se toma de las llamadas crisis externas, para justificar el bajo crecimiento económico en este lustro y del 2.4 % en el primer semestre en relación con nuestro potencial del 5%. Sin embargo, esta excusa es una contradicción, por el hecho de que las autoridades se auto regocijan por el aumento que hemos tenido en la demanda externa, cuando se proyectan ingresos en divisas cercanos a US$ 50 mil millones, por nuestro crecimiento en el turismo que llegaría a 12 millones de visitantes, de las exportaciones de bienes que durante el primer semestre se elevaron en 10.4%, de las remesas que están creciendo en 11%( por la suma de turismo y remesas ingresarían unos 23 mil millones de dólares) y un aumento de la inversión extranjera proyectada que alcanzaría un valor final de US$4700 millones”.
Por tanto, la disminución de la actividad económica no se debe a factores exógenos, aunque hay que reconocer que la elevada tasa de política de política monetaria que mantiene la Reserva federal de EEUU que actualmente está en el rango de 4.25% y 4.50%, restringe al Banco Central de la Republica Dominicana de aplicar políticas monetarias que estimulen el consumo y la inversión privada para motorizar el crecimiento económico.
Pero esta coyuntura lo que hace es confirmar el argumento de los economistas, de que en estos momentos no están dadas la condiciones para que el Banco Central sea el protagonista del estímulo económico, si no que el liderazgo debe ser asumido por el gobierno a través del gasto de capital y no del gasto corriente como erróneamente se ha hecho hasta el momento.
Por eso resulta importante que el Gobierno dominicano, a través del Ministerio de Hacienda y Economía, haya sometido al Congreso Nacional el proyecto que modifica el Presupuesto General del Estado para el 2025.
De acuerdo a las autoridades la iniciativa plantea la aplicación de una política fiscal contracíclica, orientada a mitigar los efectos de la coyuntura internacional y proteger el dinamismo de la economía nacional, mediante un incremento en el gasto de capital, priorizando la inversión pública como motor para impulsar la actividad económica y promover un crecimiento sostenible.
En total, los ingresos estimados para 2025 ascienden a RD$1,277,364.7 millones, equivalentes al 16.0 % del producto interno bruto (PIB) proyectado.
En materia de gastos, se plantea un aumento neto de RD$69,740.2 millones (4.7 % más que lo aprobado inicialmente), con una expansión del 20 % en el gasto de capital, equivalente a RD$35,548.25 millones, es decir, 0.4 % del PIB.
De acuerdo al Ministro de Hacienda y Economía Magín Díaz el presupuesto reformulado será financiado con fondos de dinero de endeudamientos y transferencias internas que quedaron sin ejecutar, por lo que el aumento del gasto no implicara un incremento de la deuda.
El economista Haivanjoe NG Cortiñas calificó este jueves de “opaca” la propuesta de modificación presupuestaria del año 2025, tras indicar que “Para mi resulta opaca hasta tanto las autoridades económicas le explican a la nación, al país que el excedente presupuestario que ellos atribuyen al año 2024, será transferido al año 2025”.
Añadió que, en el año 2024, la ejecución presupuestaria resultó con un déficit fiscal que supera los 211 mil millones de pesos, que equivale a un 3 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
Lo cierto, es que las autoridades tienen un dilema de elegir entre Crecimiento económico vs déficit fiscal, Control del tipo de cambio y control de la deuda externa, pues la coyuntura macroeconómica impide tener altos niveles de crecimiento económico y baja inflación.
Pienso que es correcta la visión de Magín Díaz al decantarse por el impulso a la economía aunque eso implique aumentar el déficit fiscal en y en consecuencia la deuda externa.
Eso es la que manda el ABC de las ciencias económicas.
Ahora bien,!!!! La gran pregunta! ¿Y cuando se apruebe este presupuesto reformulado, el presidente Abinader, cumplirá con el programa de inversiones establecido en la reforma?
¿Se impondrá las cesantes económicas sobre las apetencias políticas?
En los primeros 5 años de gestión de Luis Abinader el gasto de capital ha sido tratado con desdén, y en cambio ha habido un incremento desorbitante de la nómina publica, pensiones solidarias, tarjeta Supérate, SENASA y otros gasto corrientes improductivos.
Ni hablar de la denuncia de Leonel Fernández cuando asegura que los 775 millones dólares de Aerodom se utilizaron para comprar las pasadas elecciones y que hasta el momento nadie sabe que se ha hecho con esos recursos.
Hasta el momento el silencio ha sido la respuesta a esta terrible denuncia.
Por eso vale la pregunta, ¿la lógica económica se impondrá a los desvanes políticos, podrá Magín controlar los impulsos políticos del presidente Abinader de utilizar los recursos del Estado para su provecho político.
Como se dice ahora popularmente, ¡Veremos a ver!!