JUAN BAUTISTA CAMBIASO
Biografías Patrias para escolares: 1492-1965. Por Juan Carlos Espinal
Juan Bautista Cambiaso. (1820-1886). Nació en Génova, Italia en 1820. Llegó a Santo Domingo durante la ocupación haitiana (1822-1844) y se naturalizó dominicano. Fundador de la Marina de Guerra Nacional, organizó la primera flotilla, fuerza naval que enfrentó las invasiones haitianas después deproclamada la Independencia.
Al mando de una de las primeras goletas que armó en guerra, la ¨Separación Dominicana¨, le tocó partir hacia la costa sur, para prestar auxilio a las tropas dominicanas comandadas entonces por el general Pedro Santana.
Junto a Juan Bautista Maggiolo, que comandaba la goleta ¨María Chica¨, y Juan Alejandro Acosta en la ¨San José¨, entabló encarnizado combate con algunos buques haitianos en el puerto de Tortuguero, en la provincia de Azua, donde se libró la primera batalla naval dominicana, el 15 de abril de 1844.
Terminada la campaña militar de 1844, con el golpe de Estado encabezado por Pedro Santana y la disolución de la Junta Central Gubernativa, fue Cambiaso quien tuvo la obligación de conducirpreso, a la Torre del Homenaje, a Juan Pablo Duarte, quien, habiendo sido proclamado presidente de la república en el Cibao, sufría por entonces la persecución implacable del general Santana.
Juan Bautista Cambiaso fue nombrado jefe de las fuerzas navales de la república, las cuales organizó y disciplinó, mejorando, junto a su segundo, Juan Alejandro Acosta, las condiciones de los buques de guerra que el gobierno iba adquiriendo. Al producirse la invasión deFaustino Soulouque, en 1849, comandó las operaciones marítimas en apoyo al ejército y evitó la aproximación de las naves enemigas a las costas dominicanas.
Participó en el alzamiento de Santana contra el gobierno de Jiménes; recibió la orden de bloquear el puerto de Santo Domingo, el que mantuvo incomunicado por mar hasta el 29 de mayo de 1949, cuando se firmó la célebre capitulación de Güibia, con el triunfo de Pedro Santana y la salida hacia el extranjero del depuesto gobernante y sus funcionarios.
Dedicado al descanso en su hogar y atendiendo asuntos mercantiles, la segunda invasión de Soulouque, en 1855, lo llevó nuevamente a las armas, cuando preparó la flotilla que enfrentó la invasión extranjera, para hacer respetar las costas dominicanas. Concluida la campaña, con el triunfo del ejército dominicano y consolidada la independencia, se retiró nuevamente a su hogar y se concentró, exclusivamente, en sus asuntos comerciales.
Concluida la anexión, con el triunfo de la guerra restauradora en 1865, intervino, al momento de abandonar los españoles la República Dominicana, en el canje de prisioneros hecho en Puerto Plata bajo sus auspicios.
En condición de cónsul general de la República Dominicana volvió a Italia, pero regresó al país y falleció en la ciudad de Santo Domingo el 20 de junio de 1886.
